En el diario que mantuvimos durante nuestra visita al Bienal de Venecia adelantábamos un post sobre el Pabellón de Chile que ahora ampliamos a las obras expuestas en esa magnifica puesta en alerta de la sociedad en tan dramáticos sucesos. Ver en Jmmag
También pensamos que es un ejemplo a seguir en cuento al tratamiento del contenido lleno de actualidad y de la que denominamos arquitectura de urgencia. Por tanto es un buen laboratorio para comprobar que puede hacer el sector por solucionar e impulsar respuestas.
Macarena Cortés, profesora del Magíster en Arquitectura UC, participó como co-curadora adjunta de la muestra chilena. La autora reflexiona sobre lo que significa curar una muestra nacional de esta relevancia:
“
¿qué es lo que se debe presentar y cómo debe presentarse la arquitectura nacional en un evento de marcada condición internacional y de abierta presencia pública en medios disciplinares y culturales europeos? Exponer la arquitectura chilena contemporánea, con las modificaciones en las técnicas de representación gráfica como material, es sin duda hoy un desafío importante, sin embargo, frente a las grandes muestras de los países más desarrollados, ¿cómo puede tener algún grado de impacto una apuesta local?
…/…”
Chile 8.8. Emblemático, conmovedor, trágicamente racional . El nombre del país acercado a uno de los mayores grados de magnitud en la escala de Richter: así se presenta la exposición Chile 8.8 a las 12. Exposición Internacional de Arquitectura – La Biennale di Venezia (29 agosto – 21 noviembre 2010).
El impresionante terremoto y el posterior tsunami que el pasado 27 de febrero 2010 trastornó el corazón de la nación (el quinto terremoto más intenso del mundo) se han convertido en el foco de un inusual camino proyectivo que, partiendo por el antítesis arquitectura-terremoto, se transforma en una conmovedora travesía en la cultura, la tradición, la historia, la humanidad de un pueblo desde siempre preparado a responder a la cíclicidad de los desastres con una extraordinaria capacidad de recuperación. To rebuild the futuro significa justamente esto, reconstruir, enfrentar, reaccionar, volver a partir, conceptos fuertemente presentes en el trasfondo emocional y cultural de los arquitectos chilenos protagonistas del evento, un conjunto diverso de nombres ya renombrados a nivel nacional y jóvenes talentos emergentes, unidos profesionalmente para proporcionar soluciones prácticas en los lugares donde la obra del hombre ha sido fatalmente borrada.
La participación de Chile a La Biennale por lo tanto pon en el centro de su misión una potente parte propositiva, un momento espacio-temporal donde presentar proyectos concretos, ideas, soluciones y tecnologías, capacidades para hacer frente justamente a aquel 8.8, símbolo de destrucción, de miedo y de muerte. «Paradójicamente, este año Chile celebra el bicentenario de su independencia, dice el arquitecto Sebastián Gray, Comisario de la exposición – lo que debería haber sido un momento de alegría se convierte en un marco para reflexionar sobre los valores más profundos de nuestro patrimonio cultural. Para los arquitectos chilenos el desafío es la creación de una vida totalmente nueva, el restablecimiento de la belleza, la conservación de la historia, la reconstrucción con mayor sabiduría«. Los proyectos, los edificios, las soluciones antisísmicas presentes en La Biennale serán embajadoras de este mensaje, testigo real de un concepto de arquitectura en tamaño real y coherente con las necesidades de las personas cambiantes aspectos de la vida cotidiana, concepto además muy cercano al tema general de todo el evento.
Chile 8.8 está dividido en tres principales categorías, en una sucesión de testimonios, proyectos y soluciones estrechamente vinculadas a la tragedia del 27 de febrero. El primer grupo, titulado PATRIMONIO, reúne edificios construidos con estilemas, materiales y procesos típicos del lugar a fin de preservar la identidad histórico-patrimonial, si bien con los necesarios ajustes a los mas avanzados cánones antisísmicos. Mantener y preservar el pasado como valor cultural para el futuro, es el hilo conductor también de la segunda categoría PREFABRICACIÓN, una selección de obras y proyectos de costo limitado y velocidad de realización, que confirman su concreción en las situaciones de graves emergencias.
El tercer grupo es finalmente dedicado a las ORGANIZACIONES involucradas en el rescate, restablecer, y evaluar las situaciónes después del terremoto, esta parte también incluye proyectos destinados a crear una memoria colectiva con reportajes documentales en un conmovedor recorrido fotográfico e iconografíco.
En conclusión, a mitad entre una identidad conmemorativa y un enérgico empuje propositivo, Chile 8.8 se convierte en la oportunidad para reflexionar sobre el binomio arquitectura y eventos sísmicos a la luz de un desafío global de considerable relevancia, económica, social, cultural y humana. El desafío comienza por la exacta regulación del pliego de condiciones para las técnicas de reconstrucción, desenvolviendose entre presupuestos de bajo costo, las dificultades operacionales y la recuperación del patrimonio histórico: un paradigma arquitectónico que Chile presenta al mundo.
Título de la exhibición : Chile 8.8
Comisario: Sebastián Gray
Comisarios adjuntos: Macarena Cortés, Claudia Barattini
Comité Cultural: Horacio del Valle, Patricio Gross, Antonia Lehmann, Cristián Undurraga.
Organización por la DIRAC, Dirección de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores y de Chile.
Colaboradores: CNCA Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, Chile Fundación Imagen de la Embajada de Chile en Italia, Instituto Italo-Latinoamericano (IILA).
Diseño y montaje: Rodrigo Castillo Ltda. Proimagen en colaboración con Marcelo Olivera, Jonathan Berowski Francisco Barra.
Catálogo: Kathryn Gillmore diseño, edición y traducción por Gisela Frick.
Gracias Rodrigo Araya, y Dino Bozzi.
PARTICIPANTES
Colectivo MURO, Rodrigo Aguilar / Ignacio Ruz / Rodrigo Valenzuela / René Velásquez, Mathias Klotz / Claudio Celis / Carlos Pérez, Mathias Klotz, Squella Arquitectos, ONG Reconstruye, Escuela de Arquitectura, Pontificia Universidad, Católica de Chile, Bio Bio Proyecta, Proyecto Tarapacá, Sebastián Irarrázaval, Humberto Eliash / Claudio Santander / Alain Champion / Jorge Mora / Carlos Bustamante, Marianne Balze Arquitectos / Lyon Bosch Arquitectos, Raimundo Lira / David Rodríguez / Diego Arroyo, Consejo de Monumentos Nacionales, Emilio de la Cerda, Owar Arquitectos.
CHILE 8.8
AFTER THE EARTHQUAKE
On February 27, 2010, an apocalyptic earthquake ravaged Chile. The earthquake and ensuing tsunami affected the most populated regions of the country along approximately 400 kilometers. Apart from the capital, Santiago, and the main city of Concepción, the affected area included many important secondary cities, small rural and coastal towns, as well as the Juan Fernández archipelago.
The extent and magnitude of the earthquake, measuring 8.8 degrees in the Richter scale, and the violent tsunami that followed, have no precedent in Chile. The earthquake is considered to be the fifth strongest in recorded world history. The final death toll is estimated at 500 people, mostly from the tsunami. The financial cost for reconstruction, including lost schools, hospitals, road infrastructure and housing, is estimated at US$ 30 billion over a period of at least 4 years.
Thanks to a well organized public and private emergency response, Santiago managed to restore utilities and basic services within 48 hours. Indeed, of the thousands of contemporary mid- to high-rises in Santiago and Concepción, most were able to withstand the quake with only cosmetic damage, if any. Thank the stringent building codes and responsible building practices that have existed since the devastating earthquakes of 1939 and 1960, which leveled many older structures. But entire coastal towns and historic districts in the southern regions of Maule and Bío-Bío were erased. There, in the heartland of Chile, the postcard of our national identity, the earthquake unleashed its full force, made worse by a deadly tidal wave that swept the entire coastal area just a few minutes later, trapping many people, still shaken, inside their homes. Towns that had managed to dodge the forces of nature for hundreds of years were toppled or washed away. Beautiful old buildings of adobe and simple masonry are now gone forever.
Saddened by the irreplaceable loss of life and landmarks, the country is also scandalized by the few modern structures that crumbled, those spectacular exceptions that keep showing up on the TV news. The economic bonanza and development frenzy of the last decades seem to have allowed a degree of relaxation of the proud building standards of this country. It’s a sobering lesson for the neoliberalism favored for the past 35 years, and a huge economic and cultural setback as a nation.
Paradoxically, Chile celebrates this year its Independence Bicentennial. What would have normally been a time to rejoice and build new monuments and landmarks, is instead a time to reflect upon the deepest values of our cultural heritage, physical as well as intangible. For Chilean architects, this is the challenge of a lifetime: to restore beauty, to preserve history, to build sensibly. Sebastian Gray Architect Commissioner
CHILE 8.8
DESPUES DEL TERREMOTO
El 27 de febrero de 2010, un apocalíptico terremoto asoló Chile. El terremoto y posterior tsunami afectó las regiones más pobladas del país a lo largo de aproximadamente 400 kilómetros. Aparte de la capital, Santiago, y la ciudad de Concepción, la zona afectada incluye muchas ciudades secundarias importantes, pequeños poblados rurales y costeros, así como el archipiélago de Juan Fernández.
El alcance y magnitud del terremoto, de 8.8 grados en la escala de Richter, y el violento maremoto que le siguió, no tienen precedentes en Chile. El terremoto es considerado como el quinto más intenso registrado en la historia del mundo. La cifra final de muertos se estima en 500 personas, la mayoría a causa del maremoto. El costo financiero de la reconstrucción, incluyendo las escuelas, hospitales, infraestructura vial y vivienda perdidos, se estima en 30 mil millones de dólares durante un período de al menos 4 años.
Gracias a una bien organizada respuesta de emergencia, tanto pública como privada, Santiago logró
restablecer los servicios básicos en 48 horas. De hecho, de los miles de edificios de mediana y gran altura en Santiago y Concepción, la mayoría fueron capaces de resistir el sismo sólo con daños superficiales. Esto es gracias a las estrictas normas y responsables prácticas de construcción que han existido desde los devastadores terremotos de 1939 y 1960, que destruyeron muchas estructuras antiguas. Pero pueblos costeros y barrios históricos en las sureñas regiones del Maule y Bío Bío han desaparecido completamente.
Allí, en el corazón de Chile, la postal de nuestra identidad nacional, el terremoto desató toda su fuerza, agravado por una ola mortífera que se extendió por toda la zona costera sólo unos minutos más tarde, atrapando a muchas personas, todavía aterrorizadas, dentro de sus hogares. Ciudades que habían logrado eludir a las fuerzas de la naturaleza durante cientos de años fueron derribadas o arrasadas. Bellísimos edificios antiguos de adobe y simple albañilería han desaparecido para siempre.
Entristecido por la pérdida irreparable de vida y monumentos, el país también está escandalizado por
aquellas pocas estructuras modernas que se derrumbaron, esas espectaculares excepciones que se repiten en los noticiarios de televisión. La bonanza económica y el frenético desarrollo de las últimas décadas parecen haber permitido un grado de relajación de las orgullosas normas constructivas de este país. Es un mensaje aleccionador para el neoliberalismo favorecido en los últimos 35 años, y un enorme retroceso económico y cultural como nación.
Paradójicamente, Chile celebra este año el Bicentenario de su Independencia. Lo que normalmente habría sido un momento de regocijo y de construir nuevos monumentos y lugares simbólicos, es más bien un tiempo para reflexionar sobre los valores más profundos de nuestro patrimonio cultural, tanto físico como intangible. Para los arquitectos chilenos, este es el desafío de toda una vida: restaurar la belleza, preservar la historia, construir con sensatez.
Sebastián Gray
Arquitecto Comisario
CHILE 8.8
DOPO IL TERREMOTO
Il 27 febbraio 2010, un terremoto apocalittico devastò il Cile. Il terremoto e l’ulteriore tsunami hanno colpito le regioni più popolate del paese, in una lunghezza di circa 400 chilometri. Oltre la capitale, Santiago, e la città di Concepción, l’area interessata comprende molte importanti città secondarie, piccoli borghi rurali e costieri ed anche l’arcipelago Juán Fernández.
L’estensione e la gravità del sisma, di 8,8 gradi sulla scala Richter, e il violento tsunami successivo non hanno precedenti in Cile. Il terremoto è considerato il quinto più intenso nella storia del mondo. Il bilancio finale delle vittime è stimato in 500 persone, principalmente a causa dello tsunami. Il costo finanziario della ricostruzione, tra scuole, ospedali, infrastruttura viaria e abitazioni mancanti è stimato in 30 miliardi di dollari per un periodo di almeno quattro anni.
Grazie ad una ben organizzata reazione d’emergenza, pubblica e privata, Santiago è stato in grado di
recuperare i servizi basici in 48 ore. In fatti, tra le migliaia di edifici di media e grande altezza a Santiago e Concepcion, la maggior parte è stata in grado di resistere al terremoto con soltanto danni estetici. Tutto grazie alle regole severe e alla consapevolezza delle pratiche costruttive che sono in vigore dai devastanti terremoti del 1939 e il 1960, che distrussero tante vecchie strutture. Ma le città costiere e quartieri storici nelle regioni meridionali del Maule e Bío Bío sono completamente scomparse. Lì, nel cuore del Cile, vera cartolina postale della nostra identità nazionale, il terremoto ha scatenato tutta la sua forza, aggravato da un’onda letale che colpì tutto il litorale pochi minuti più tardi, intrappolando tante persone ancora impaurite nele loro case. Le città che avevano eluso le forze della natura per centinaia di anni sono state demolite o rase al suolo. Bellissimi edifici in terra cruda o in muratura sono scomparsi per sempre.
Afflitto per la terribile perdita di vite e monumenti, il paese è stato anche scandalizzato dalle poche strutture moderne che sono crollate, spettacolari eccezioni che si ripetono nei telegiornali. Il boom economico e lo sviluppo frenetico degli ultimi decenni sembra aver permesso un certo grado di rilassamento degli orgogliosi regolamenti edilizi di questo paese. E un messaggio che fa riflettere sul neoliberismo privilegiato negli ultimi 35 anni, e anche un enorme passo indietro tanto economico come culturale in tanto nazione.
Paradossalmente, il Cile festeggia quest’anno il bicentenario della sua indipendenza. Ciò che normalmente sarebbe stato un momento di gioia e l’opportunità di costruire nuovi monumenti e luoghi emblematici, diventa piuttosto un tempo per riflettere sui valori più profondi del nostro patrimonio culturale, tanto fisico come intangibile. Per gli architetti cileni, questa è la sfida di tutta una vita: ripristinare la bellezza, preservare la storia, costruire con saggezza.
Sebastian Gray
Architetto Comissario
Casa Coya
OWAR Arquitectos
Ubicación
Coya, Machalí. VI región
Autores
OWAR Arquitectos (Alvaro Benítez, Emilio De la Cerda, Tomás Folch)
Evan Sellmyer Pruitt / USA
Colaboradores
Patricio Larraín
Año de Proyecto y Construcción
2008-2010
Superficie Construida
460 M2
Casa Coya está emplazada en la cordillera de Rancagua, en una meseta de boldos y espinos con amplias vistas al valle del Cachapoal y a la cordillera de Los Andes. Las construcciones agrícolas de la zona conservan una fuerte tradición material y tipológica, la cual constituye el sustrato que informa las primeras lógicas de proyecto.
Un extensivo zócalo de piedra local, excavado en el cerro y proyectado desde la meseta, negocia entre la topografía del sitio y la escala de la casa. El cuerpo de la misma está organizado en torno a dos barras opacas, cuyos espacios han sido graduados por pequeñas cajas de madera que contienen los servicios y que arriostran lateralmente el sistema. Estas barras están unidas por una tercera zona transparente que contiene el patio cubierto, la explanada de acceso y los estares interiores. El dramático paso entre los muros perimetrales y el interior doméstico genera un amplio rango de condiciones espaciales que nuevamente ajustan la escala del paisaje a las lógicas domésticas.
Se han incorporado ciertos rasgos formales y ambientales característicos de la casa de campo chilena pero adaptando estas propiedades a los requerimientos de un sistema antisísmico, por medio del uso de estructura de madera, muros de fardo de paja de trigo, malla metálica y estucos de adobe. A pesar de estar ubicada en una de las zonas afectadas por el terremoto de Febrero de 2010, la estructura resistió sin problemas la magnitud de los esfuerzos. Parte importante de los materiales han sido obtenidos en la zona o traídos de demoliciones, por lo que a la neutralidad del lenguaje empleado se suma una cierta pátina que vuelve ambigua la temporalidad de la casa. Esta condición fina del grano reafirma la dualidad contemporánea e histórica del proyecto.
BALE CONSTRUCTION PROCESS
SITE VIEW
LIVING ROOM
TECHNICAL DRAWINGS
Casa Coya un modelo antisísmico exitoso.
Intriga, asombra, sugestiona: Casa Coya es una de las realizaciones más interesantes en el panorama arquitectónico chileno, un proyecto firmado por el Estudio OWAR en colaboración con la arquitecta norteamericana Evan Pruitt.
Situada entre las montañas del Rancagua en un altiplano con baja y rica vegetación, coronado por la majestuosidad de la cordillera de Los Andes, encierra un carisma absolutamente particular, tanto por su ubicación como por el ciclo de diseño que la caracteriza.
Análogamente a los otros proyectos de la sección Patrimonio en la muestra Chile 8.8 , también Casa Coya relee emblemáticamente en clave contemporánea la herencia pasada y las tradiciones estilísticas locales enriqueciéndolas con las modernas técnicas antisísmicas. Dada su posición, los cimientos están firmemente anclados en la roca mediante un plinto basal sobre el cual se erige una fachada panorámica de desarrollo longitudinal extremadamente racional. En su interior los espacios se caracterizan por una serie de microestructuras que degradan progresivamente desde la parte opuesta donde toma vida un pórtico luminoso con patio y corral. Todos los espacios domésticos se alternan en un juego balanceado a partir del muro perimetral.
Neutra, pura, esencial, atemporal: Casa Coya retoma los tramos característicos de las habitaciones rurales integrándolos con innovadores sistemas antisísmicos a través del uso de rellenos con paja, redes de acero, revoque y arcilla, que han sido particularmente eficientes. La casa, en efecto, no ha sido dañada por el terremoto del pasado febrero, resultando un modelo exitoso para el futuro.
OWAR ARQUITECTOS
Carlos Antúnez 2275 of.11, Providencia, Santiago, Chile
tel/fax: (56-2) 334 3311
Oficina formada en el 2005 en Santiago de Chile por Álvaro Benítez, Emilio De la Cerda y Tomás Folch, arquitectos de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Actualmente desarrolla proyectos públicos y privados de diversa índole, además de mantener una labor docente en la misma casa de estudios. Su trabajo ha obtenido diversos premios – “Bienal de Arquitectura de Santiago” en 2008, “Monumento a la Integración Chileno-Argentina” en 2009 – y ha sido incluido en la Revista a+“44 Young Architects” (Barcelona 2008).
PROYECTO DE RECONSTRUCCION CALETA CURANIPE
El proyecto propone reutilizar las instalaciones dañadas por el terremoto y maremoto, repensando la caleta de Curanipe en base a un contexto de naturaleza extrema, condicionada por fuertes vientos y marejadas. La estrategia de diseño se basa en una serie de mantos plegados que articulan distintos espacios en respuesta a la protección del viento, orientación solar y las vistas predominantes, formando un sistema de circulación continuo que conecta espacios productivos, instalaciones turísticas y un paseo de borde costero. Este proyecto forma parte de la iniciativa Ruta de las Caletas, financiada por AMSA y gestada por AOA para revitalizar la zona costera de la región del Maule.
Luego del terremoto y maremoto que el pasado 27 de Febrero de 2010 afectó a los poblados de la VII Región del Maule, se propuso crear una Ruta Patrimonial en el borde costero y reconstruir la infraestructura productiva pesquera, artesanal y turística, relacionándola transversalmente con el resto del territorio chileno. AMSA, una empresa minera privada, invitó a los arquitectos de la AOA a participar en este proyecto, tomando el desastre como una oportunidad para planificar el borde costero y proponer la recuperación de las zonas productivas del área.
Nuestra oficina tomó el encargo de la caleta Curanipe (piedra negra en mapudungun) que representa el remate de esta ruta. Su costa es especialmente buena para la pesca e internacionalmente conocida por el surf y su paisaje geográfico destaca en la zona atrayendo un gran afluente turístico.
Mediante la integración de volúmenes existentes y proyectados proponemos crear una continuidad espacial y de flujos de circulación que conecten al pueblo con el borde costero a través de grandes espacios públicos que combinan trabajo y recreación.
El primer nivel contiene las actividades pesqueras y de mercado en una estructura sólida de hormigón diseñada para permitir el paso del agua ante posibles maremotos. El segundo nivel es una estructura de madera local que articula una serie de espacios de recreación interconectados, a través de un volumen continuo que se pliega definiendo plazas, paseo y explanadas de trabajo.
La sustentabilidad del proyecto se trabaja con pantallas de madera que a modo de mantos van protegiendo los volúmenes del fuerte viento reinante, cuya energía se capta y regenera a través de turbinas eólicas. Los aleros se regulan según sus orientaciones y la climatización de los interiores se controla con fachadas y cubiertas ventiladas.
Nombre del proyecto
Proyecto de reconstrucción caleta Curanipe / Ruta de las caletas
Ubicación
Curanipe, provincia de Cauquenes, VII región del Maule
Autores
Marianne Balze R. (Marianne Balze arquitectos)
Arturo Lyon G. (Lyon Bosch arquitectos)
Colaborador
Felipe Correa T. (Marianne Balze arquitectos)
Año del proyecto
2010
Superficie
Superficie terreno – 6884.91 m2
Superficie construida – 1405.51 m2
Costo estimado
$355.000.000 (Chile)
USS 662.000
Euro 538.000
Autores:
ARTURO LYON
Arquitecto de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) y Master en el Design Research Laboratory de la Architectural Association (AA). Ha trabajado en Zaha Hadid Architects y dictado clases y workshops en la AA enfocados en diseño paramétrico y uso de algoritmos en arquitectura. Actualmente es profesor en PUC y co- fundador de LyonBosch Arquitectos.
MARIANNE BALZE
Arquitecto de la Universidad de Chile y directora de la Asociación de oficinas de Arquitectos (AoA). Su oficina desarrolla proyectos de planificación urbana, vivienda unifamiliar, en altura y social, proyectos industriales y comerciales tanto en Chile como en el extranjero. Sus obras han sido publicadas en distintos medios. Participó como profesora en la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Las caletas de Boyeruca, Duao, Los Pellines, Loanco, Pelluhue y Curanipe, en la Región del Maule y arrasadas por el terremoto y tsunami, fueron escogidas por la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA) para transformarse en hitos de la «Ruta de las caletas», iniciativa impulsada por Antogasta Minerals (AMSA) y que forma parte del proyecto «Estamos contigo».
«Dos semanas después de la catástrofe varios asociados de la AOA recorrimos la zona y nos encontramos con un entorno escénico de singular belleza, aunque desconocido y poco explotado. Volvimos a Santiago y reafirmamos el deber de restablecer la capacidad productiva de las caletas, a través de la habilitación de su infraestructura básica y la entrega de herramientas de trabajo como botes y motores, pero propusimos potenciar estos lugares, incorporándoles un valor agregado a la pesca», explica el arquitecto David Rodríquez, quien además de diseñar nuevas caletas en Los Pellines y Pelluhue (esta última junto a Enrique Browne), ofició de coordinador de la Ruta.
Aparte de recuperar boxes, sedes sindicales y servicios higiénicos -no todas tenían el mismo equipamiento-, decidieron dotar a cada caleta de un atractivo particular: un restorán, un mercado, un paseo peatonal, una plaza o una tienda de productos regionales o de surf. «La idea es generar un entorno turístico; que estos espacios sean un lugar de encuentro, un paseo obligado en la región, el punto de partida o de término de distintos corredores que unen el borde costero con la cordillera», dice Rodríguez.
«Los recorridos o ejes transversales siempre incorporan ciudades relevantes como Curicó, Talca o Parral, y conectan el borde costero con sectores notables de la cordillera, como Los Queñes, laguna del Maule o del Dial», detalla el arquitecto Miguel Contreras, de la firma URBE, y quien como parralino no dudó en participar en este proyecto.
La cercanía de Contreras con la región y su amplio conocimiento del litoral lo llevó a proyectar la caleta de Loanco, «emplazada entre el faro Carranza, zona de loberas y cultivos de locos, y la laguna Reloca, un humedal con mucha vida silvestre». El punto de partida de este volumen son los vestigios de la obra gruesa que quedó de la antigua caleta. Eso se rescató y planteó una nueva losa para proteger la zona de trabajo del sol poniente, como un gran alero de uso productivo. En el primer piso agregó servicios para un camping vecino, mejoró el área de procesamiento de productos -principalmente locos- y reconstruyó los boxes. En el segundo nivel generó una estructura para cocina y comedores orientados a las mejores vistas y protegidos del asoleamiento y el viento.
«Acordamos ciertos criterios de diseño. En todos los proyectos se recicló lo que era recuperable para no malgastar recursos, y trabajamos con los mismos materiales: estructuras de hormigón revestidas con piedra laja de la zona, pino tratado y techos de cobre, como símbolo de que esta iniciativa fue financiada por una minera», explican los arquitectos Marianne Balze y Arturo Lyon, quienes se asociaron para dotar a Curanipe de otra caleta. Ellos recuperaron dos volúmenes, modificando su rígida apariencia al incorporar grandes mantos que generan interiores y exteriores resguardados del fuerte viento y del sol. También redistribuyeron el programa básico e incorporaron un restorán en el segundo piso del módulo de menor superficie, que en el primero alberga al mercado y al área destinada a la cocción de jaibas.
Un caso único es el de Boyeruca -caleta destinada al cultivo de ostras y que fue reciclada por Guillermo Bustos y Sebastián Guevara, de Big Arquitectos-, pues tenía 40 m2 destinados sólo a bodega, y antes de fin de año -la fecha de entrega de la Ruta es el 27 de diciembre- contará con boxes, baños diferenciados para trabajadores y público, camarines, sede social y restorán. «Los pisos se proyectaron como módulos independientes; entre ambos hay una dilatación importante que permitiría, en caso de tsunami, que el agua pase y se devuelva al mar sin arrasar con todo», indica Guevara.
Algo similar podría ocurrir en la caleta de Duao, donde en el primer piso el arquitecto Germán Lamarca habilitó una serie de corredores que hacen que el volumen sea muy permeable.
«No sólo hemos estado trabajando en recomponer y mejorar la infraestructura, dotando a las caletas de programas complementarios que son clave para potenciar el turismo y el crecimiento regional, sino que hemos incorporado toda la ingeniería necesaria para hacer frente a una nueva emergencia», explican los socios de Big Arquitectos, firma que incluso está a cargo de coordinar la inspección técnica de la Ruta, obra que en total involucra 4.660 m2 construidos.
CMN
Consejo Monumentos Nacionales
MONUMENTOS NACIONALES
Es la institución estatal a cargo de la supervisión y tuición del patrimonio monumental, incluido el arqueológico. Su secretario ejecutivo es el abogado, Óscar Acuña Poblete, quien, inmediatamente después del terremoto de febrero, formó equipos de trabajo dedicados a la evaluación de los daños en bienes patrimoniales, creando una comisión especial que coordina la arquitecta Mirja Díaz Santibáñez. Ambos participaron en la edición del Catálogo Nuestro Patrimonio Hoy, junto a Elena Cruz Turell, licenciada en Diseño de Ambientes y Objetos, directora de proyectos de la Corporación Patrimonio Cultural de Chile, entidad de carácter privado y sin fines de lucro dedicada a tender puentes entre el mundo público para la preservación del patrimonio cultural
RECONSTRUCCION IGLESIA MATRIZ DE CURICO – CHILE
El terremoto de 1985 produjo daños en la Iglesia Matriz de Curicó, ubicada al costado de la Plaza de Armas de esta ciudad. Las autoridades de la época tomaron la decisión de demoler el interior, y conservar el frontis y los muros perimetrales. En 1993, el Obispado de Talca decide reconstruir la iglesia. Para ello, encarga una iglesia de tamaño menor a la iglesia existente, con el propósito de vender parte del terreno restante.
El proyecto propone poner en valor el significado que tiene para la comunidad e historia curicana, la concepción y permanencia total del espacio que la iglesia siempre ocupó. Por lo cual, se propone una plaza interior entre la nueva iglesia y el antiguo campanario, que media y relaciona con la plaza de Curicó, manteniendo las dimensiones originales de la antigua iglesia.
Se crea un muro que juega con las proporciones de los existentes y un cielo separado de los bordes, dejando una luz que valora los muros originales unificando lo antiguo y lo nuevo. El espacio interior es unitario y libre de pilares para facilitar la relación feligreses y sacerdote, que son recibidos en el altar por un muro que se abre en dos brazos crecientes.
Así, el primer propósito del proyecto es extender la iglesia a la plaza de Curicó y a la vez incorporar la plaza al interior de la iglesia. La imagen de la plaza e iglesia son importantes para el habitante de esta ciudad. Por ello, la intervención propone volver a habitar este lugar, reteniendo la imagen y memoria del proyecto histórico que ahí existió, transformando sin dañar el recuerdo.
FICHA TÉCNICA
Nombre del proyecto: Reconstrucción Iglesia Matriz de Curicó – CHILE
Ubicación: Esquina de Yungay con Merced, Curicó, Chile
Arquitectos: Squella Arquitectos
Jorge Squella Avendaño
Jorge Squella Correa
Sebastián Squella Correa
Germán Squella Correa
Año: 1993-2005
Superficie construida: 1.620 m2
Un nuevo espacio para la espiritualidad: el proyecto Iglesia Matriz.
En la sección “Patrimonio” de la muestra Chile 8.8 ha sido seleccionado un proyecto de gran interés artístico y arquitectónico, la reconstrucción de la Iglesia Matriz en Curicó, muy dañada por el terremoto de 1985.
Las autoridades de la época decidieron demoler el interior, fuertemente comprometidos pero conservar el frontis y los muros perimetrales. En 1993 el Obispado de Talca decidi dar inicio a los trabajos de reconstrucción de una iglesia de tamaño menor a la iglesia existente, con el propósito de vender parte del terreno restante.
Los trabajos fueron encargados al grupo Squella Arquitectos con la misión de realizar un edificio que preservara el patrimonio cultural, social y religioso de la ciudad de Curicó, teniendo en cuenta el esqueleto perimetral conservado; una solución brillante fue la introducción de una plaza interna entre la nueva iglesia y la torre del campanario para crear un espacio de antecámara que vinculara virtualmente las partes pre y post-terremoto. El juego de refracción de luces en la pared perimetral y en los espacios internos valoriza el efecto escénico entre la antigua iglesia y la parte reconstruida. En cambio, internamente notamos la ausencia de columnas, de consecuencia, la presencia de un espacio unitario que facilita la relación entre los fieles y el sacerdote. Por último, el mantenimiento de la fachada original constituyó una clara voluntad de conservar la imagen original de la plaza que encuentra en la Iglesia Matriz un absoluto punto focal.
El valor del proyecto consiste precisamente en esto: la recuperación de un área fuertemente dañada por el sismo conservando un edificio histórico y preservando su memoria colectiva para el futuro.
Nombre del proyecto: Reconstrucción Iglesia Matriz de Curicó – CHILE
Ubicación: Esquina de Yungay con Merced, Curicó, Chile
Arquitectos: Squella Arquitectos, Jorge Squella Avendaño, Jorge Squella Correa, Sebastián Squella Correa, Germán Squella Correa
Año: 1993-2005
Superficie construida: 1.620 m2
Photographs by: Constanza Lazarovich.
EL CONSEJO DE MONUMENTOS NACIONALES
El Consejo de Monumentos Nacionales es el organismo técnico del Estado de Chile encargado de la protección y tuición del patrimonio cultural y natural de carácter monumental. Fue creado en 1925, depende del Ministerio de Educación, y realiza su labor en el marco de la Ley Nº 17.288 de Monumentos Nacionales (1970) y de su Reglamento sobre Excavaciones y Prospecciones Arqueológicas, Antropológicas y Paleontológicas (1994).
El sismo tuvo una intensidad de 8,8 grados en la escala de Richter, el quinto más fuerte del mundo desde que se realizan mediciones. Las imágenes revelan la magnitud de los daños en cinco monumentos nacionales. No obstante, la recuperación es posible gracias a la existencia de registros que orientarán las obras y a la adopción de medidas oportunas para proteger los bienes afectados.
HACIENDA SAN JOSÉ DEL CARMEN DE EL HUIQUE
DIAGNÓSTICO DE DAÑOS
Grado de daños: Mayor
Descripción de daños: Colapso de pórtico de la iglesia y de un 40% de la casa patronal
Medidas adoptadas: Declarado inhabitable
Recomendación: Proyecto de recuperación integral
MAUSOLEO CLAUDIO VICUÑA
DIAGNÓSTICO DE DAÑOS
Grado de daños: Mayor
Descripción de daños: Colapso de cúpula, desprendimiento de elementos ornamentales, grietas y fisuras
Medidas adoptadas: Cercado
Recomendación: Proyecto de recuperación integral
IGLESIA DE GUACARHUE
DIAGNÓSTICO DE DAÑOS
Grado de daños: Mayor.
Descripción de daños: Nave derrumbada, altar, nave lateral y torre con riesgo de colapso
Medidas adoptadas: Declarado inhabitable
Recomendación: Proyecto de reconstrucción
RAMAL FERROVIARIO TALCA – CONSTITUCIÓN
DIAGNÓSTICO DE DAÑOS
Grado de daños: Mayor
Descripción de daños: Mayoría de estaciones con daño severo y generalizado al igual que línea férrea. Estaciones más dañadas: Talca, Colín, Corinto y Maquehua
Medidas adoptadas: Estaciones dañadas declaradas inhabitables
Recomendación: Proyecto de recuperación integral
ADUANA LOS QUEÑES
DIAGNÓSTICO DE DAÑOS
Grado de daños: Mayor
Descripción de daños: Tres de los cuatro torreones parcialmente colapsados
Recomendación: Proyecto de recuperación integral
NUESTRO PATRIMONIO HOY
La información de este catálogo fue recogida en terreno y posteriormente procesada por los profesionales del Consejo de Monumentos Nacionales, con la colaboración de voluntarios de diversas profesiones y ámbitos de acción. Dicha tarea comenzó el mismo día del terremoto.
La publicación consta de las fotografías de 63 monumentos históricos y zonas típicas, antes y después del sismo, además de la información técnica esencial. Fue elaborada por el Consejo de Monumentos Nacionales y la Corporación Patrimonio Cultural de Chile, con el apoyo de Minera Escondida.
Su objetivo es contribuir a recuperar el patrimonio de Chile Central, cuya alta frecuencia sísmica evidencia la necesidad de técnicas que permitan preservar la identidad asegurando la seguridad de las personas.
NUESTROS SITIOS DE PATRIMONIO MUNDIAL: SEWELL / VALPARAÍSO / SALITRERA SANTA LAURA / ISLA DE PASCUA / IGLESIAS DE CHILOÉ
Memoria
Desde la misma mañana del 27 de febrero los profesionales del Consejo de Monumentos Nacionales-institución estatal a cargo de la supervisión y tuición del patrimonio monumental-, junto a voluntarios de diversas profesiones, de los ámbitos público y privado, del país y el extranjero, se volcaron a terreno para constatar el daño que provocó el terremoto en el Patrimonio Cultural chileno.
Gran parte de esa información, compilada en fichas técnicas estándar y posteriormente procesada, está reflejada en el catálogo “Nuestro Patrimonio Hoy”, publicación realizada en colaboración con la Corporación Patrimonio Cultural de Chile y el apoyo Minera Escondida.
Los testimonios fotográficos de 63 monumentos históricos y zonas típicas, antes y después del sismo, junto a la información técnica, develan el doble desafío que impone la nueva realidad: es preciso poner en pié el patrimonio, pero Chile es un país sísmico, escenario repetido de este tipo de catástrofes, por lo tanto habrá que recurrir a técnicas mixtas que permitan preservar la identidad de los inmuebles garantizando la seguridad de sus ocupantes.
El objetivo de “Nuestro Patrimonio Hoy” es dejar un registro que oriente el trabajo de recuperación y a su vez convoque a la cooperación entre los distintos actores y al compromiso que requiere este esfuerzo. Sin duda, esta tarea adquiere especial relevancia en el año del bicentenario.
La publicación ha sido organizada por capítulos según región: de Valparaíso, del Libertador general Bernardo O’higgins, del Maule, del Biobío y Metropolitana. En ella están sólo los casos más emblemáticos; lamentablemente son muchos más los monumentos nacionales dañados, especialmente en las regiones de O’higgins y del Maule.
Titulo del proyecto: Catálogo y exhibición fotográfica “Nuestro Patrimonio hoy”
Autores: Consejo de Monumentos Nacionales, Corporación patrimonio cultural de Chile.
Créditos Fotográficos: Consejo de Monumentos Nacionales, Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, Comisión Asesora de Monumentos Nacionales Región de Valparaíso, Comisión Asesora de Monumentos Nacionales Región del Maule, Comisión Asesora de Monumentos Nacionales Región del Libertador General Bernardo O’Higgins, Archivo El Mercurio, Archivo Fotográfico Consejo de Monumentos Nacionales, Karina Aliaga, Patricio Arias, John Bravo, Ángel Cabeza, Atilio Caorsi, Eduardo Contreras, Mirja Díaz, Tomás Domínguez, Nelson Gaete, Alicia Galdames, Felipe Gallardo, Purísima Garrido, Ricardo González, José Guajardo, Juan Carlos Gutiérrez, Carlos Inostroza, Teófilo Martínez, Christian Matzner, Gloria Núñez, Flor Recabarren, María Fernanda Rojas, Rodrigo Salgado, Karina Sánchez, Roberto Sánchez, Sebastián Seisdedos, Macarena Silva, Francisco Tacussis, Pedro Valenzuela, Ignacio Velasco.
Año del proyecto: 2010
PROYECTO MEMORIA
Es una organización sin fines de lucro, nacida post-terremoto en Concepción/Chile, bajo el amparo de la Universidad de Concepción. Conformada por estudiantes y profesionales ligados a la construcción, busca apoyar a zonas afectadas con proyectos de reconstrucción. Un campo de acción corresponde al “Diseño del espacio Público” con énfasis en la conservación de la memoria. En este marco el coordinador Patricio Mora (Licenciado en arquitectura UDEC), los arquitectos Hilda Basoalto (UDEC/2010), Claudia Cerda (UDEC/2009), Leonel Pérez (UBB/1994) y Viviana Vilches (UDEC/2009) y el estudiante UBB Felipe Rivera, crean “Proyecta Memoria”. Proyecto que busca abrir el debate en torno a la conservación del patrimonio destruido, con la idea del reciclaje de escombros simbólicos para reutilizarlos en espacios públicos chileno.
Proyecta memoria es una propuesta innovadora que se orienta a salvaguardar el patrimonio arquitectónico chileno, destruido por el terremoto del 27 de febrero de 2010, a través de la recuperación y reciclaje de los escombros simbólicos en el espacio público.
Se plantea concebir los escombros ya no como basura sino como elementos que poseen memoria, recuerdos, vivencias que marcaron una identidad como país. Así, se propone transformarlos en un símbolo tangible y vivo, que se vuelven a moldear, en elementos de reciclaje como, plazas, parques y áreas peatonales.
Surgen así: muros memoriales, mobiliario urbano, nuevas texturas, esculturas, abatimientos de fachadas simbólicas, que erigidos en estos espacios con la fuerza y potencia de la conmemoración. Le otorgan un nuevo rol al espacio público; el de recordar y conservar la memoria, dejando atrás la amnesia sísmica, que tan fácilmente invade a la sociedad chilena.
Los conceptos que aquí se plasman: memoria, escombros, reciclaje, patrimonio, expresan vida y transformación. Nos hablan de unir pasado y presente, proyectando un futuro con políticas de acción frente al tema de las catástrofes y la pérdida de identidad. Una sociedad que ha borrado su memoria, no posee una base solida para formar a las nuevas generaciones.
Proyecta Memoria, es un mensaje de aliento para las sociedades que se ven afectadas por grandes catástrofes, con azotes de furia en donde se ve amenazado el patrimonio de las comunidades, pero que luchan incansablemente por mantener su memoria e identidad
01 – BÍOBÍO proyecta
Exposición y conferencias dictadas por Bío Bío Proyecta, para la difusión de “Proyecta Memoria”.
Autor: Viviana Vilches Wolf / Alejandro Valencia
02 – Iconos destrucción
Iconografía alusiva a la destrucción del patrimonio arquitectónico chileno y la creación de la organización como su consecuencia directa.
Autor: Viviana Vilches Wolf
03 – Iconos reciclaje
Iconografía alusiva al reciclaje y reutilización del escombro simbólico en el espacio público.
Autor: Viviana Vilches Wolf
04 – Facultad de Ciencias Químicas UDEC
Facultad de Ciencias Químicas, Universidad de Concepción. Edificio emblemático, creado en la década del 60 y demolido en el 2010 como consecuencia de un incendio originado por el terremoto.
Autor: Viviana Vilches Wolf
05 – Escombro Facultad de Ciencias Químicas UDEC
Escombro simbólico de la Facultad de Ciencias Químicas, Universidad de Concepción.
Autor: Viviana Vilches Wolf
06 – Secuencia escombros simbólicos
Secuencia de escombros simbólicos.
Autor: Viviana Vilches Wolf
07 – Secuencia montículos
Montículos generados con relleno de escombros simbólicos.
Autor: Viviana Vilches Wolf
08 – Muro memorial y escultura
Escombros simbólicos, apilados, incrustados o moldeados, que se transforman en Muros Memoriales o Esculturas.
Autor: Hilda Basoalto Mosquera – Claudia Cerda Inostroza
09 – Mobiliario
Pie de foto: Mobiliario urbano construido a partir de escombros simbólicos.
Autor: Hilda Basoalto Mosquera
10 – abatimiento de fachada
Representación en el plano horizontal de la fachada del edificio destruido por la catástrofe por medio del uso de composiciones con escombros simbólicos (montículo, muro memorial, textura de piso, escultura, mobiliario urbano).
Autor: Patricio Mora Araya
BÍO BÍO PROYECTA / PROYECTA MEMORIA
Reciclaje de escombros simbólicos y su uso en el espacio público
Proyecta memoria es una propuesta innovadora que contiene una valiosa orientación para salvaguardar el patrimonio arquitectónico chileno, destruido por el terremoto del 27 de febrero de 2010, a través de la recuperación y reciclaje de los escombros simbólicos en el espacio público.
Su filosofía plantea concebir los escombros ya no como basura sino como elementos que poseen memoria, recuerdos, vivencias que marcaron una identidad como país.
Los conceptos que aquí se plasman–memoria, escombros, reciclaje, patrimonio–expresan vida y transformación. Nos hablan de unir pasado y presente, proyectando un futuro con políticas de acción frente al tema de las catástrofes y la perdida de identidad, pues una sociedad que ha borrado su memoria, no posee una base sólida para formar a las nuevas generaciones.
PROYECTA MEMORIA es un mensaje de aliento para las sociedades que se ven afectadas por grandes catástrofes, con azotes de furia en donde se ve amenazado el patrimonio de las comunidades, pero que luchan incansablemente por mantener su memoria e identidad.
BÍO BÍO PROYECTA es una organización nacida tras el terremoto del 27 de febrero de 2010 en Concepción/Chile, bajo el amparo y auspicio de la Universidad de Concepción. Conformada por estudiantes y profesionales relacionados al área de construcción, busca apoyar a zonas afectadas con proyectos de reconstrucción. Un campo de acción importante corresponde al diseño del espacio público con énfasis en la conservación de la identidad local y memoria. PROYECTA MEMORIA fue creado sobre la base de esta idea. Este proyecto busca abrir el debate en torno a la conservación del patrimonio destruido, con la idea del reciclaje de escombros simbólicos para reutilizarlos en espacios públicos memoriales.
UBICACIÓN: Enfocado a desarrollarse en el espacio público de lugares afectados por una catástrofe natural, donde los edificios representativos para la comunidad hayan sufrido algún tipo de daño, quedando total o parcialmente reducido a escombros simbólicos.
AUTORES:
Patricio Mora A., Licenciado en Arquitectura, Universidad de Concepción
Hilda Basoalto M., Arquitecto, Universidad de Concepción
Claudia Cerda I., Arquitecto, Universidad de Concepción
Leonel Pérez, Arquitecto, Doctor en Urbanismo UPC, docente Universidad de Concepción
Felipe Rivera, Estudiante de Arquitectura, Universidad del Bío-Bío
Viviana Vilches W., Arquitecto, Universidad de Concepción
COLABORADORES:
Ricardo Arellano, Estudiante de Arquitectura, Universidad del Bío-Bío
Daniela García Letelier, Licenciado en Arquitectura, Universidad de Concepción
FECHA PROYECTO: Marzo 2010
Facultad de Ciencias Químicas, Universidad de Concepción, incendiada producto del terremoto y actualmente demolida
Escombros simbólicos que pertenecieron a construcciones importantes
Ficha Técnica
Nombre del Proyecto: Proyecta Memoria
Ubicación: Regiones Chilenas afectadas por el terremoto del 27 de febrero del 2010
Autores: Lic. en Arquitectura Patricio Mora Araya
Doc. En urbanismo Leonel Pérez Bustamante
Arq. Hilda Basoalto Mosquera
Arq. Claudia Cerda Inostroza
Arq. Viviana Vilches Wolf
Est. de Arquitectura Felipe Rivera Yáñez
Colaboradores fotografía: Gustavo Burgos
Alejandro Valencia.
Año del Proyecto: Año 2010
Año de su realización: Año 2010
Costo estimado:
Proyecto en espacios públicos: 4 UF m2 aprox
Postales escombros simbólicos: $ 4.000.000 para 20.000 unidades
Expo escombros simbólicos: $ 500.000
Capacitación municipalidades y universidades: $ 200.000
Guía técnicas: $ 2.000.000
Intervenciones urbanas: $ 2.000.000
Reconstruir y exportar una herencia cultural: Proyecto Tarapacá
Proyecto Tarapacá es seguramente uno de los nombres más significativos de la sección “Patrimonio” en el marco de la muestra Chile 8.8: podemos afirmar a pleno título, en efecto, que dicho proyecto es el emblema de cómo poder reconstruir una herencia arquitectónica local a través de nuevas tecnologías, nuevas direcciones, nuevos vanguardismos exportables en cada área del mundo tristemente golpeada por un sismo. Tipicidad y tecnología se funden y se compensan convirtiéndose una en la embajadora de la otra.
El proyecto ha sido realizado por un equipo de arquitectos de la Universidad Católica de Chile, como respuesta concreta a la reconstrucción del pueblo histórico de San Lorenzo de Tarapacá, en la I Región de Tarapacá, destruido por el violento terremoto de 2005, convirtiéndose pronto en un blanco experimental hoy propuesto nuevamente para la reconstrucción de los pueblos de Chanco, VII Región del Maule, azotados, en cambio, por el sismo del 27 de febrero de 2010.
Analogías y paralelismos bajo diferentes puntos de vista se convierten en un auténtico “caso de diseño arquitectónico” basado en la identificación del valor hereditado de la comunidad, de la sociabilidad y del patrimonio arquitectónico: a nivel estético y a nivel técnico, en efecto, los elementos de estilo autóctonos son mantenidos y emulados en clave moderna, primero entre todos ellos, un sistema constructivo que mezcla estructura de hormigón con el uso de adobe como revestimiento térmico, el que ha sido aplicado en la construcción de una Biblioteca en dicho poblado.
La metodología planteada contempla 5 etapas: diagnóstico de la situación luego del sismo; análisis de los elementos patrimoniales del poblado, que sirven como base para el diseño arquitectónico; plan de reconstrucción, en el cual se contemplen las distintas acciones de intervención para cada vivienda; diseño de proyectos específicos y, finalmente, la ejecución de éstos principalmente mediante subsidios de reconstrucción otorgados por el estado
Reconstruir y exportar una herencia cultural: operación posible.
Ficha Técnica
Nombre del proyecto: Propuesta de reconstrucción patrimonial Proyecto Tarapacá
Ubicación: San Lorenzo de Tarapacá, I Región de Tarapacá, Chile. Chanco, VII Región del Maule, Chile.
Nombre de los autores: Proyecto Tarapacá: Bernardita Devilat, Verónica Illanes, Samuel Bravo, Natalia Spörke, Felipe Kramm (colectivo).
Arquitectos Biblioteca: Proyecto Tarapacá, Álvaro Silva + parte equipo ganador Concurso Tarapacá [Umberto Bonomo, Phillippe Blanc, Macarena Burdiles y Cristián Olivos]
Colaboradores: Álvaro Silva, Renato D´Alençon, Francisco Prado.
Año del proyecto: 2005-2009: San Lorenzo de Tarapacá (Diseño Biblioteca: 2007) – 2010-2014: Chanco
Año de realización: 2007: Construcción prototipo – 2009: Biblioteca completa.
Superficie: Biblioteca Tarapacá: 70,4 m2
Costo estimado: 490 $/m2
Plano de Chile indicando terremoto de 2005 en el Norte y terremoto de 2010 en el sur del país.
Elevación fotográfica y plano de daños producidos en San Lorenzo de Tarapacá por el sismo de 2005. Los colores más oscuros indican mayor grado de daño.
Identificación de elementos patrimoniales de San Lorenzo de Tarapacá: fachada continua de viviendas, zócalos, sombras, utilización del espacio público durante la Festividad religiosa de San Lorenzo.
DEVILAT, Bernardita. Fotografía exterior Biblioteca Tarapacá terminada. San Lorenzo de Tarapacá, Chile. Julio, 2009.
DEVILAT, Bernardita. Fotografía interior Biblioteca Tarapacá terminada. San Lorenzo de Tarapacá, Chile. Julio, 2009.
PROYECTO TARAPACÁ+ equipo ganador Concurso Tarapacá. Planta Biblioteca Tarapacá.
PROYECTO TARAPACÁ+ equipo ganador Concurso Tarapacá. Escantillón sistema constructivo empleado en Prototipo Tarapacá.
DEVILAT, Bernardita. Propuesta para la vivienda en base a componentes que se adaptan a los distintos sitios de San Lorenzo de Tarapacá: zócalos, módulos habitables, sombreaderos, muros programáticos y medianeros.
PROYECTO TARAPACÁ. Plano de Chanco identificando viviendas ya demolidas y elevación fotográfica luego del sismo de 2010.
PROYECTO TARAPACÁ. Identificación de elementos patrimoniales de Chanco: fachada continua de viviendas, techumbres de larga dimensión y corredores como configuradores del espacio público.
Proyecto Tarapacá es una iniciativa para la reconstrucción del patrimonio arquitectónico, llevada adelante por arquitectos de la Pontificia Universidad Católica de Chile, que plantea la búsqueda de nuevas directrices, tanto teóricas como tecnológicas, para abordar la reconstrucción de pueblos de interés patrimonial afectados por catástrofes naturales, teniendo en cuenta la inexistencia de una lógica de reconstrucción atingente y específica para estos casos, especialmente en el ámbito de la vivienda.
Este proyecto nace como respuesta a la destrucción generada por el terremoto de 2005, ocurrido en el Norte de Chile, en base al caso de San Lorenzo de Tarapacá, poblado protegido por su valor patrimonial. Se propone replicar la experiencia adquirida a otros poblados de similares características afectados por el terremoto del 27 de Febrero de 2010, partiendo por el caso de Chanco, también protegido por su valor histórico y cultural, ubicado en el sur del país.
Desde el año 2005 se ha estado trabajando en la identificación de valores patrimoniales en conjunto con la comunidad, lo cual ha culminado en el diseño y construcción de un sistema constructivo que mezcla estructura de hormigón con el uso de adobe como revestimiento térmico, el que ha sido aplicado en la construcción de una Biblioteca en dicho poblado. La metodología planteada contempla 5 etapas: diagnóstico de la situación luego del sismo; análisis de los elementos patrimoniales del poblado, que sirven como base para el diseño arquitectónico; plan de reconstrucción, en el cual se contemplen las distintas acciones de intervención para cada vivienda; diseño de proyectos específicos y, finalmente, la ejecución de éstos principalmente mediante subsidios de reconstrucción otorgados por el estado (€ 18.791).
Arquitectura PUC
info@proyectotarapaca.org
56-9-83417037
PROPUESTA DE RECONSTRUCCIÓN PATRIMONIAL – PROYECTO TARAPACÁ
Proyecto Tarapacá busca nuevas directrices, tanto teóricas como tecnológicas, para abordar la reconstrucción de pueblos de interés patrimonial afectados por catástrofes naturales, teniendo en cuenta la inexistencia de una lógica de reconstrucción atingente y específica para estos casos, especialmente en el ámbito de la vivienda.
Este proyecto nace como respuesta a la destrucción generada por el terremoto de 2005, ocurrido en el Norte de Chile, en base al caso de San Lorenzo de Tarapacá, poblado protegido por su valor patrimonial. Se propone replicar la experiencia adquirida a otros poblados de similares características afectados por el terremoto del 27 de Febrero de 2010, partiendo por el caso de Chanco, también protegido por su valor histórico y cultural, ubicado en el sur del país.
La metodología planteada contempla 5 etapas: diagnóstico de la situación luego del sismo; análisis de los elementos patrimoniales del poblado, que sirven como base para el diseño arquitectónico; plan de reconstrucción, en el cual se contemplen las distintas acciones de intervención para cada vivienda; diseño de proyectos específicos y, finalmente, la ejecución de éstos principalmente mediante subsidios de reconstrucción otorgados por el estado (€ 18.791).
CONSTRUCCIÓN
Desde el año 2005 se ha estado trabajando en la identificación de valores patrimoniales en conjunto con la comunidad, lo cual ha culminado en el diseño y construcción de un sistema constructivo que mezcla estructura de hormigón con el uso de adobe como revestimiento térmico, el que ha sido aplicado en la construcción de una Biblioteca en dicho poblado.
PROPUESTA DE RECONSTRUCCIÓN PATRIMONIAL – PROYECTO TARAPACÁ
UBICACIÓN: San Lorenzo de Tarapacá, I Región de Tarapacá, Chile.
AUTORES: Proyecto Tarapacá (Bernardita Devilat, Verónica Illanes, Samuel Bravo, Natalia Spörke, Felipe Kramm)
ARQUITECTOS BIBLIOTECA: Proyecto Tarapacá, Álvaro Silva + parte equipo ganador Concurso Tarapacá (Umberto Bonomo, Phillippe Blanc, Macarena Burdiles y Cristián Olivos)
COLABORADORES: Renato D´Alençon, Francisco Prado.
AÑO DEL PROYECTO: 2007
AÑO DE CONSTRUCCIÓN: 2007-2009
SUPERFICIE: 70,4 m2
COSTO SISTEMA CONSTRUCTIVO TARAPACÁ: 12 UF/m2
Habitad Rural
HABITAT RURAL POST EMERGENCIA
IMPLEMENTACION DE UN PROTOTIPO PARA LA COMUNA DE PAINE, CHILE
1. El proyecto se enmarca dentro del convenio de Asistencia Técnica suscrito entre la Universidad de Santiago de Chile y la Ilustre Municipalidad de Paine, como producto de los daños ocasionados por el terremoto que afectó a esta comuna en Febrero de 2010, surgiendo la necesidad a mediano plazo de pensar, proyectar y proporcionar una vivienda definitiva para una cantidad considerable de familias que perdieron en parte o por completo sus viviendas.
2. El reciente terremoto generó un problema no sólo en las ciudades sino también en extensas áreas rurales, deteriorando nuestro patrimonio arquitectónico y dejando una considerable cantidad de viviendas en estado inhabitable. Teniendo presente que la arquitectura rural de la zona central posee una rica tradición, es posible sostener que las actuales soluciones dadas a la vivienda social en zonas no urbanas poseen dos problemáticas básicas: su diseño constituye una solución estandarizada e inadecuada a las condiciones de la vida del campo, y las ofertas carecen de flexibilidad en cuanto a su uso, como resultado de las exiguos presupuestos manejados.
3. En consecuencia, se logran soluciones desarraigadas a las condiciones de lugar y con crecimientos informales y heterogéneos. A partir de la interpretación de la arquitectura tradicional rural, tomando su espacialidad y vinculación con el entorno, se plantea una vivienda flexible en su configuración, brindado espacios transformables en el tiempo, dotándola de un espacio intermedio y un interior de muros móviles que cambian dependiendo de la necesidad de espacio.
La propuesta gira en torno a una estructura en base a pilares y vigas que delimitan un ámbito de posibilidades de transformación y con un núcleo duro de instalaciones permanentes. Sobre esta retícula que define una cubierta, se dispone una serie de soportes móviles deslizantes para configurar el espacio interior. De esta forma, estructura, cubierta y paneles de madera dan paso a una vivienda con un interior flexible, que se adapta a las distintas necesidades del usuario.
HABITAT RURAL POST EMERGENCIA
UBICACIÓN: Paine, Chile
AUTORES: R. Aguilar, I. Ruz, R. Valenzuela, R. Velásquez (USACH)
AÑO DE PROYECTO: 2010
Muro Pumanque
Pasada la etapa de emergencia, es necesario plantearse el problema de la construcción y re-construcción patrimonial en función de cubrir las necesidades urgentes de las personas, y al mismo tiempo preservar las condiciones que constituyen el patrimonio arquitectónico propio del valle de Colchagua.
De los elementos tantos formales como materiales que constituyen los valores arquitectónicos, urbanos y sociales de esta zona se han identificado aquellos mínimos que contribuyen más fuertemente a la recuperación y fortalecimiento de dicho patrimonio:
Estos lineamientos, abstractos en sí mismos, son puestos a prueba en una intervención concreta que propone la reconstrucción parcial de la localidad de Pumanque. Esta propuesta, sin embargo, se configura como una “estrategia de reconstrucción” más que como un proyecto para una localidad específica. El proyecto identifica en la construcción de un muro la posibilidad de responder a los requerimientos específicos de habitabilidad y preservación del patrimonio; un muro que en su desarrollo contiene frente urbano, cubierta, corredor continuo y espacio habitable, separando el contexto rural del frente de calle que define la tipología de los pueblos tradicionales del valle central.
Como intervención, el proyecto no se encarga de reconstruir las casas patrimoniales destruidas por el terremoto, ya que éstas debieran ser reconstruidas aplicando las tecnologías originales, sino más bien se orienta a recuperar las construcciones cuyo valor patrimonial no está claramente definido, pero que reconstruidas de esta manera contribuyen a superar la emergencia y al mismo tiempo fortalecen la imagen urbana característica de estos pueblos.
MURO PUMANQUE
UBICACIÓN: Pumanque, Valle de Colchagua, VI Región, Chile.
AUTORES: Colectivo MURO (Maximiano Atria, Umberto Bonomo, Rodrigo Santa María, Cristián Olivos, Felipe Alarcón, Nicolás Urzúa)
ASESORES TÉCNICOS: Cristián Olivero
AÑO DE PROYECTO: 2010
MATERIALES PREDOMINANTES: Bloques de cemento, madera, acero
COSTO ESTIMADO: US$ 15.000 (14 metros lineales de muro, 140 m2 cubiertos, 36 m2 habitables)
Imágenes
1.- Desarrollo urbano de Pumanque, Valle de Colchagua, VI región, Chile (COLECTIVO MURO).
2.- Desarrollo urbano de las distintas soluciones ofrecidas por el gobierno y solución “Wall” (colectivo muro).
3.- Íconos patrimoniales (COLECTIVO MURO).
4.- Isométrica explotada del módulo base (COLECTIVO MURO).
5.- Planta vivienda tipo; fase 1, fase 2, fase 3 (COLECTIVO MURO).
6.- Isométrica explotada vivienda tipo; fase 1, fase 2, fase 3 (COLECTIVO MURO).
7.- Imagen de proyecto 1 (COLECTIVO MURO).
8.- Imagen de proyecto 2 (COLECTIVO MURO).
9.- Imagen de proyecto 3 (COLECTIVO MURO).
Muro Pumanque, connubio entre urbano y rural en un proyecto antisísmico.
En la sección “Patrimonio” de la muestra Chile 8.8, el grupo de arquitectos Colectivo Muro presenta el rendering Muro Pumanque, un proyecto de 2010 y presentado pocas semanas después del desastre sísmico del febrero pasado. El destino de realización es Pumanque, un pequeño pueblo situado en la VI Región en la Provincia de Colchagua, fuertemente dañada por el cataclismo.
Punto de partida del proyecto es la asociación entre la necesidad inminente de reconstrucción, con el fin de dar a la población nuevas viviendas y la firme voluntad de conservar la herencia cultural del lugar, presente en los cánones estilísticos y arquitectónicos de la región. La apuesta en juego es precisamente un patrimonio social, arquitectónico y urbanístico que debe ser preservado y propuesto nuevamente en el futuro, aún cumpliendo las modernas exigencias antisísmicas. El equipo de jóvenes arquitectos ha pensado a un edificio con un techo longitudinal continuo que constituye el cuerpo de la construcción creando al mismo tiempo uniformidad entre los diferentes núcleos de viviendas. Paralelamente la columnata externa forma un corredor común sobre el cual se asoman ventanas y puertas rigurosamente en estilo.
El “muro” es un espacio que determina sociabilidad pero distingue también la dimensión pública de aquella privada, un concepto preexistente en los pequeños edificios de Pumanque: el contexto rural está separado del contexto urbano, así como el pasado es diferente del presente pero se unen en una simbiosis ordenada y racional.
Ficha Técnica
Nombre de la obra: Muro Pumanque
Ubicación: Pumanque, Valle de Colchagua, VI región, Chile.
Autores: Colectivo MURO, Maximiano Atria, Umberto Bonomo, Rodrigo Santa María, Cristián Olivos, Felipe Alarcón, Nicolás Urzúa
Asesores Técnicos: Cristián Olivero
Año de proyecto: 2010
Materiales predominantes: Bloques de cemento, madera, acero
Costo estimado: US$ 15.000
Superficie: 14 metros lineales de muro, 140 m2 cubiertos, 36 m2 habitables
ONG Reconstruye
Terremoto y Ciudad
Las ciudades del Centro-sur de Chile se vieron seriamente afectadas por el terremoto de febrero del 2010. Ante este hecho devastador, la postura del Gobierno central ha sido entregar la reconstrucción de las ciudades a grandes grupos económicos, renunciando a su deber de promover el bien social por sobre intereses particulares. Reconstruye plantea trabajar directamente con organizaciones sociales, de manera de generar nuevos modelos de negocio inmobiliario, en los cuales las plusvalías urbanas sean capitalizadas directamente por los usuarios-inmobilarios organizados: una metodología de intensificación urbana generada por los propios afectados, con el apoyo técnico-profesional de Reconstruye.
Terremoto y Vivienda
La política de reconstrucción impulsada por el Gobierno a raíz del terremoto, no responde a la magnitud del problema real con el que se enfrentan aquellos que fueron directamente afectados. Los instrumentos implementados son los mismos que estaban siendo utilizados hasta el día antes del terremoto. Desde Reconstruye planteamos realizar una relectura de estos mecanismos normativos, financieros y de gestión a la luz del nuevo escenario, y crear una metodología integral que sea capaz de generar nuevos instrumentos: un método de trabajo generativo, un proyecto que entregue herramientas para construir una nueva ciudad.
Vivienda y Sociedad
Creemos que lo más importante es el modelo de sociedad que estamos planteando. Los objetos arquitectónicos no son capaces por si solos de generar cambios culturales. Lo importante es cambiar la manera de entender el negocio inmobiliario. Lo fundamental es entender que los edificios son la materialización de un modelo de sociedad, y que si no apuntamos a cambiar nuestra manera pensar y producir la ciudad, nunca podremos construir edificios sustentables social, económica y medioambientalmente.
NOMBRE DEL PROYECTO
PROYECTO EQUIPAMIENTO BARRIAL Y ALBERGUE DE EMERGENCIA y MODELO DE
GESTIÓN DE VIVIENDA COOPERATIVA EN TALCA
UBICACIÓN
Población Santa Ana y Barrio Seminario Talca, Región del Maule
Autores
ONG Reconstruye
Instituciones involucradas
ONG Reconstruye www.reconstruye.org
Co-op s.a. www.co-op.cl
FAR www.f-a-r.net
Supersudaka www.supersudaka.cl
Comceci www.comceci.com
Año del proyecto
Inicio proyecto mayo de 2010. Presentación de anteproyectos en septiembre de 2010. Inicio de
construcción en diciembre de 2010.
Costo estimado
El costo de construcción está por definir.
PUC
Selección de Imágenes para Catálogo Bienal de Venecia
Escuela de Arquitectura Pontificia Universidad Católica de Chile
Fabricación Vivienda de Emergencia (VEP) en Escuela de Arquitectura UC.
Autor: Macarena Burdiles
Planimetría Vivienda progresiva de emergencia (VEP)
Fabricación Paneles Vivienda de Emergencia (VEP) por estudiantes Arquitectura UC
Autor: Macarena Burdiles
Levantamiento calle principal de Curepto con localización de viviendas emergencia
Autor: Estudiantes Taller de Formación II.
Montaje VEP EN Curepto por Estudiantes de Taller de Formación II
Autor: Adrian Albisser.
Proyecto de Afianzamiento y recuperación de la nave central de la Iglesia de Curepto.
Autor: Rodrigo Pérez de Arce, Arturo Lyon
Croquis Proyecto de Reconstrucción Iglesia de Curepto. jpg
Autor: Antonia Besa, Ignacio Cruz, Tomás Franke
Croquis de Proyecto de Recuperación de la Iglesia de Chanco.
Autor: Alex Moreno / Cristian Larraín
SISTEMA CUREPTO
FICHA TECNICA
Nombre proyecto: RECONSTRUCCIÓN IMAGEN URBANA DE LOS PUEBLOS DE LA ZONA CENTRAL DE CHILE
Ubicación: CUREPTO, VII REGION, CHILE
Nombre Autores: Raimundo Lira, David Rodríguez, Diego Arroyo, Rocío Costa, Alvaro Schwember.
Colaboradores: Fundación Gabriel & Mary Mustakis.
Municipalidad de Curepto
Empresas Arauco
Año del proyecto: 2010
Año de realización: 2010
Superficie: 800 m2
Costo estimado: US $ 37.500
MEMORIA
El terremoto del 27 de febrero produjo grandes daños en la arquitectura de la zona central de Chile, materializada en sencillas casas de adobe y carpinterías en madera. Ante la catástrofe y la angustia de los pobladores, se comenzó con la extracción de escombros. Las retroexcavadoras arrasaron indiscriminadamente con las construcciones inhabitables, dañando las contiguas; destruyendo totalmente lo recuperable.
La imagen urbana de fachadas continuas principalmente de un piso de altura, techumbres a dos aguas y corredores exteriores se perdió, dando lugar a sitios eriazos en los sectores consolidados de estas localidades. Las construcciones con usos mixtos de vivienda y comercio, que daban vida a los centros, desaparecieron.
En este contexto, el proyecto consiste en reconstruir contemporáneamente la imagen urbana, necesaria para la memoria de los pueblos y acompañar a los edificios patrimoniales que quedaron en pié.
Se propone una envolvente en base a un volumen central de dos pisos al cual se le adosa un corredor exterior y un módulo de ampliación al interior del lote. Con esto es posible lograr las proporciones, dimensiones y alturas de las construcciones características de la zona. La estructura, antisísmica, es propuesta en madera con relleno de tierra hacia la calle y tejas de arcilla. El volumen de dos pisos, permite un uso mixto y diferenciado en sus niveles.
El plan de ejecución de cinco casas continuas en un largo 56 metros en la calle principal de Curepto, VII Región, será el primer caso y prototipo de esta solución. Programas de comercio y módulo sanitario se disponen en el primer piso y habitacional en el segundo.
El financiamiento de tipo mixto, considera aportes de privados para el corredor, del estado para el módulo central y sanitario; y del propietario para la ampliación.
Proyecto “Reconstrucción imagen urbana de los pueblos de la zona central de Chile”
– Nº1 –Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: Lira Arquitectos – Municipalidad de Curepto
Fachadas continuas y corredores en áreas urbanas del Valle Central, VI y VII Región.
– Nº2 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: Lira Arquitectos – Diego Arroyo
Imagen urbana después del Terremoto del 27 de Febrero 2010. Curepto, VII Región.
Nº3 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: – Lira Arquitectos – Rocío Costa
Plantas Curepto antes del terremoto – Curepto después del terremoto – Ubicación de la propuesta
Nº4 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: – Lira Arquitectos – Diego Arroyo, Álvaro Shuember
Planta calle principal Curepto. Intervención propuesta
Nº5 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: – Lira Arquitectos – Diego Arroyo, Álvaro Shuember
Propuesta para recuperación perfil de calle zonas urbanas-Pueblos Valle central VI y VII regiones
Nº6 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: – Lira Arquitectos – Diego Arroyo, Álvaro Shuember
Plantas propuestas reconstrucción. Corredor de uso público/ subsidio/ Ampliación
Nº7 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: – Lira Arquitectos – Diego Arroyo, Álvaro Shuember
Sistema de agrupación y repetición completando línea de fachadas y/o corredores.
Nº8 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: – Lira Arquitectos –Rocío Costa
Fotomontaje propuesta reconstrucción de espacio publico
Nº10 – Sistema de reconstrucción para Zonas Urbanas Valle Central VI y VII regiones.
Autor: – Lira Arquitectos – Álvaro Shuember, Rocío Costa
imágenes Maqueta
Curepto, o bien, el patrimonio del pasado mentor de la reconstrucción.
El área central de Chile ha sido una de las zonas más dañadas por el terremoto del 27 de febrero de 2010, no sólo por la cercanía al epicentro, sino también por la presencia de construcciones bastante simples, materializada en sencillas casas de adobe y carpinterías en madera. En muchos pueblos los escombros han sido extraídos y las habitaciones en ruina rasadas al suelo. De consecuencia, la apuesta en juego en numerosas situaciones es una reconstrucción desde cero que incluye la conservación de las características típicas de los edificios patrimoniales, un desarrollo modular continuo con techos inclinados y amplios porticados.
El proyecto para el pueblo de Curepto presupone sustancialmente la reconstrucción total de la instalación urbanística según una imagen de funcionalidad contemporánea pero sin convulsionar el patrimonio arquitectónico anterior. El grupo de arquitectos ideadores de esta propuesta ha pensado una envolvente en base a un volumen central de dos pisos al cual se le adosa un corredor exterior y un módulo de ampliación al interior del lote. Con esto es posible lograr las proporciones, dimensiones y alturas de las construcciones características de la zona. La estructura, antisísmica, es propuesta en madera con relleno de tierra hacia la calle y tejas de arcilla. El volumen de dos pisos, permite un uso mixto y diferenciado en sus niveles.
Dicho proyecto involucraría cinco bloques de viviendas por una longitud de 56 metros, colocados en la calle central de Curepto: los nuevos espacios serían la sede de actividades comerciales y modernos núcleos de habitaciones.
Ficha Técnica
Nombre proyecto: Reconstrucción imagen urbana de los pueblos de la zona central de Chile
Ubicación: Curepto, VII Región, Chile
Nombre Autores: Raimundo Lira, David Rodríguez, Diego Arroyo, Rocío Costa, Alvaro Schwember.
Colaboradores: Fundación Gabriel & Mary Mustakis. Municipalidad de Curepto Empresas Arauco
Año del proyecto: 2010
Año de realización: 2010
Superficie: 800 m2
Costo estimado: US $ 37.500
EL PAISAJE DEL TSUNAMI
Las fotografías del paisaje del tsunami son resultado de varios viajes que comencé el lunes 22 de febrero, justamente la semana del terremoto. El recorrido elegido fue la costa chilena, entre el Lago Budi y Pichilemu.
En los últimos días de vacaciones, busqué con mi cámara recuerdos de algún remoto viaje que hiciera de niño con mi familia, registrando lugares que una y otra vez describieran los relatos de mi abuela, quien pasó largas temporadas acompañando a mi bisabuelo en la construcción del ferrocarril entre Contulmo, Lebu y Constitución.
Los caminos me condujeron a un puñado caletas de cuatro o cinco casas, a un conjunto de paisajes silenciosos y playas solitarias, que sólo son visitadas por ganado pastando. Llegué hasta cementerios abandonados, hoteles destartalados a través de muchos caminos de tierra.
Tragué mucha tierra. Visité ciudades congestionadas, deterioradas por industrias humeantes y malolientes. Dormí en Boca Budi, Lanalhue y Dichato. Finalmente el jueves 26, descansé en un lugar de surfistas en Pichilemu.
El viernes por la tarde regresé a Santiago, sin imaginar que la madrugada del sábado 27 de febrero, apenas unas horas después de haber llegado a mi casa, despertaría sacudido por un terremoto, y que los setecientos kilómetros de costa que acababa de recorrer, habrían cambiado para siempre.
Es por esto que decidí regresar para registrar (en distintos formatos visuales) el paisaje arrasado por el tsunami. Los mismos sitios, pero no ya aquellos lugares que recorrí. Sumé a estos destinos la Isla Robinson Crusoe, pese a no haberla visitado con anterioridad, ya que me pareció relevante cerrar el círculo impactado por esta ola y sus consecuencias.
Con la única intensión de hacer un registro de lo que dejó ese desastre natural -tanto fotográfico como videográfico – partió un grupo a recorrer la cosa desde Pichilemu hasta Talcahuano. Mientras Carlos Pérez Villalobos junto a Claudio Celis Bueno grababan imágenes de la costa, Mathias Klotz los acompañaba con su cámara fotográfica. “Traté sacar fotos desde un punto de vista arquitectónico, es decir, como si fueran fotos de arquitectura que son sacadas con una determinada cámara, lente, posición y encuadre”. Alrededor de 700 fotografías, que el arquitecto nunca pensó exponer, nacieron en ese viaje.
“Lo que tratamos de hacer, no fue un registro periodístico”, explica Klotz, “ya que en ese tiempo ya estaba muy saturado especialmente enfocado en el tema de los damnificados. Nosotros buscamos más bien hacer un registro despojado de todo el drama humano y mediático del minuto. Esa fue una de las razones por la que fuimos un mes después de ocurrido el tsunami”.
Veintiocho fotografías de 55 x 35 cm y dos de 1,00 m por 35 cm retratarán ese recorrido en esta muestra. “La sensación que transmiten tanto las fotografías como el documental es de un paisaje solitario, hecho de despojos y sin la presencia de personas. El hecho de que parte del territorio afectado fuera un borde costero asociado a segundas viviendas, acentuaba ese paisaje fantasmal. Sin embargo, incluso en Talcahuano, único lugar poblado denso que visitamos, el centro estaba cercado y evacuado, por lo que incluso ahí encontrabas esa sensación desoladora”.
Fue Carlos Pérez Villalobos el que vio en las fotografías de Mathias Klotz un trabajo que era capaz de marcar un cierto rimo y pausas en las grabaciones de su documental que registra –sin locución- el recorrido que hizo este grupo a través de una cámara siempre en movimiento.
Tanto el documental –que será exhibido en loop- como las fotografías “buscan reflejar una sensación de que este desastre no termina nunca, con estos 600 kilómetros de costa destruidos seriamente. La situación es muy fuerte, un terremoto rompe las cosas, pero un tsunami genera otro tipo de destrucción ya que arrasa con todo. Como el primer borde que registramos quedó inhabitable, esa primera franja entre la playa y el pueblo era desoladora”.
Mathias Klotz agrega que “el paisaje después del desastre es muy quieto. En general todo fue silencioso y eso se puede ver en las fotografías. Busqué reflejar ese silencio, hay una búsqueda de una cierta atmósfera de paz ex profeso haciendo alusión a ese momento que se produce cuando todos apagan las luces de un lugar para irse a la casa”.
Más información en www.mathiasklotz.com
Mathias Klotz 2010
TEXTOS
RECONSTRUCCIÓN MATERIAL
Emilio De la Cerda / Arquitecto OWAR
El reciente terremoto en Chile ha transformado el problema de la forma construida en una urgencia. Como pocas veces, la escala de la necesidad y la extensión del daño[1] parecieran exhortar a distintas disciplinas a asumir un rol definido en la recuperación de las áreas afectadas, ya sea a través de una labor de diagnóstico, ya sea en la propuesta de modelos capaces de adelantarse primero al invierno y luego a las complejas condicionantes de la localización, el clima, el uso, los recursos o la tradición. Esta inesperada coyuntura plantea, por otra parte, una especie de examen de grado donde deberán medirse la madurez y la pertinencia no solo de las estrategias trazadas sino de los métodos a través de los cuales pretendamos hacerlas efectivas y de los supuestos que éstas encierran.
Entre los múltiples flancos abiertos, uno de los que ha definido posiciones más claras hasta el momento, aunque no por ello coincidentes, ha sido el que respecta a la condición material con que debería pensarse la reconstrucción de las zonas dañadas, ubicadas principalmente en el área central y costera del país y en donde se concentra gran parte del patrimonio ligado a la infraestructura rural del Chile colonial. Este debate, al estar centrado principalmente en si debe o no darse el tiro de gracia a la tradición constructiva del adobe – confinando su uso a aquellos inmuebles patrimoniales singulares que por su condición de monumentos no resistirían la aplicación de técnicas nuevas o falsos históricos -, ha descuidado un tópico igualmente central, aquel referido a cómo construir.
Centro de Talca, Marzo de 2010. Fotografía del autor.
Es precisamente esta pregunta por la especificidad de la forma, tanto en sus valores singulares como en los de conjunto, la que debería concentrar parte importante de nuestros esfuerzos, toda vez que ésta es inseparable de la condición material que hoy intentamos aislar como una variable abstracta – aunque, quizás, esta omisión no se deba sencillamente a un descuido sino que tenga una raíz más profunda, cual es la voluntad implícita por reconstruir exactamente lo perdido y no dejar espacio para la intromisión de propuestas formales alternativas.
Esta primera reacción deja en evidencia un mito que impide ver con claridad el problema, aquel referido a que el adobe constituía, al momento del terremoto, una alternativa constructiva viable y aceptada, susceptible de ser replicada a escalas mayores. Pese al esfuerzo de muchos profesionales que han acumulado un amplio conocimiento del material, y cuyo trabajo constituye ahora un pilar fundamental en la recuperación de ciertos edificios o conjuntos emblemáticos, esta técnica constructiva ya había sido desahuciada por la normativa sísmica chilena y por los equipos de expertos desde hace bastante tiempo[2].
Frente a esta constatación, y aceptando el supuesto de que no será éste el momento en que se revierta dicha tendencia – especialmente considerando que el 90% del adobe de las zonas afectadas quedó en el suelo[3] -, cabe preguntarse ¿cuáles son los valores tipológicos y formales ligados a esta condición material que sería deseable rescatar y reinterpretar con otras técnicas en la reconstrucción de las zonas dañadas, especialmente los cascos históricos? De esta capacidad prospectiva depende en gran medida la pertinencia y justeza de las futuras intervenciones en dichos contextos.
LOS DISTINTOS PARADIGMAS DE LA RECONSTRUCCIÓN
Una de las principales consecuencias del terremoto es que estamos obligados a mirar la forma histórica dos siglos después, con una revolución material, constructiva y disciplinar de por medio, con las exigencias de confort y eficiencia ya instaladas y con una urgencia social que, rápidamente y de forma paralela, se transforma en vara para medir la acción del gobierno en curso. La tensión provocada por la conjunción de estos factores tiene alcances bien definidos, los que a la vez involucran entradas distintas más no necesariamente excluyentes.
Los primeros alcances, fijados por la necesidad de dotar de vivienda a las familias damnificadas, se encuentran cubiertos principalmente por la acción conjunta del Estado y la empresa privada, éste definiendo estrategias de acción y metas, y aquélla respondiendo a los incentivos al concretar las líneas generales por medio de proyectos individuales. Dicha dinámica constituye la entrada política y se ha visto reflejada en la instalación del paradigma de la unidad singular prefabricada.
Los segundos alcances, referidos a la dimensión histórico-urbana, y mediante los cuales se deben vislumbrar las consecuencias que las decisiones de hoy puedan tener en el futuro de la forma construida y en los usos a ella asociada, no cuentan aún con una institucionalidad cohesionada, con un discurso articulado o con una escala que los convierta en un actor relevante dentro de la toma de decisiones – de hecho, gran parte de la energía invertida y de la discusión generada en este frente se ha centrado en la condición material tratada anteriormente. Por las mismas razones, no han logrado aún definir su propio paradigma.
Este desequilibrio se hace evidente al momento de analizar el denominado “Programa de Reconstrucción Nacional en Vivienda: Chile Unido Reconstruye Mejor”, trazado por el Gobierno para enfrentar por medio del sistema de subsidios[4] la reconstrucción de las cerca de 200.000 viviendas destruidas en los segmentos más vulnerables de la población del país.
En dicho instrumento, desglosado en siete puntos que constituyen las directrices que guiarán este proceso y definirán a la vez sus alcances histórico-urbanos, se propone que las viviendas con daños mayores o pérdida total, de las que el 80% se emplazan en sitios individuales, sean reemplazadas por modelos prefabricados diversos a elegir por cada propietario – hecho que refuerza la carga ideológica de la estrategia política. Ésta parece ser una solución certera en términos de escala, tiempos de cobertura y ventajas comparativas de un país productor de madera como Chile, pero puede resultar muy tosca al momento de reconocer la experiencia acumulada, la necesaria interpretación a contextos específicos o la dinámica urbana en que las piezas no se entienden como hechos singulares sino que en su interdependencia y en su noción de conjunto.
Feria Inmobiliaria del Maule, Junio 2010. Ejemplos de viviendas prefabricadas propuestas como modelos definitivos dentro del Plan de Reconstrucción. Fotografías de Gregorio Brugnoli.
De los modelos propuestos[5], el 100% corresponde a viviendas autónomas, donde el sentido de evacuación de aguas generalmente no coincide con el del acceso, con ventanas en sus cuatro frentes y volumetrías compuestas. De esta forma, aquellos centros urbanos que antes del terremoto presentaban unidades compactas, con alturas comunes de edificación, de fachadas y cubiertas continuas, podrían ser reemplazados por modelos de vivienda aislada donde, entre otras consecuencias, las piezas no necesariamente guardarán relación entre sí en términos de volumen, la subdivisión del interior doméstico establecerá una rigidez y un tamaño atomizado de recintos que escasamente permitirán la flexibilidad programática y el desarrollo futuro, la calle quedará escindida del frente construido – reemplazado ahora por una reja – y en donde quedarán expuestos los muros medianeros de aquellas unidades que sí lograron permanecer en pie, reforzándose la fragmentación de una forma urbana otrora cohesionada.
Además, y en términos menos tipológicos, la señal no es clara respecto al destino de estos centros, ya que en lugar de plantear modelos capaces de incrementar sus antiguas densidades, lo que era un problema contingente antes del terremoto en ciudades como Talca, o de adaptarse a escenarios inciertos, como los que generalmente encierra la dinámica urbana, se ha optado por esquemas de densidades bajas y usos rígidos.
Es en la constatación y asimilación de este escenario posible e inminente donde aparece con claridad la necesidad de esgrimir un nuevo paradigma de reconstrucción que complemente el propuesto por la lógica política.
LA IDEA DE LA FORMA COMO CONSTRUCCIÓN HISTÓRICA
La explosión de los medios para transmitir información ha permitido, entre otras muchas cosas, que los arquitectos podamos disimular nuestras fuentes y mantener la ilusión de que la forma tiene la capacidad para re-inventarse otra vez, cada vez.
El reemplazo de los valores de conjunto por los singulares, a través de la búsqueda de nuevos lenguajes formales, ha desplazado el eje de rotación de la disciplina hacia campos especulativos cuyo interés queda suscrito a logros académicos que muchas veces no encuentran un campo específico de aplicación.
La ansiedad que esta situación trae aparejada puede ser un pésimo socio al momento de plantear la pregunta adecuada respecto a la manera en que debe concebirse un proceso de reconstrucción como el que enfrentamos, donde la pulsión por hacer de esta experiencia un campo de prueba de nuevos horizontes debe ser moderada por una clara noción de los valores que se pretende mantener, recuperar o potenciar.
Esta difícil definición no pertenece exclusivamente a nuestra realidad histórica aunque sí se encuentra intensificada por ella. Al referirse al Palacio Ducal – en “Las Piedras de Venecia”, publicado originalmente en 1851 -, John Ruskin señala que “la majestad de este monumento único tuvo el poder de detener en pleno espasmo la imaginación gótica; de calmar de un solo golpe el ardor de imaginación; de prohibir la busca de nuevos tipos, la creación de una obra aún más seductora”. Más de cien años después, en 1966, y en abierta reacción a la idea de originalidad instalada por los modernos, Charles Eames reconoce en el Lota, un tipo de recipiente circular utilizado en la India para usos cotidianos, las virtudes de un diseño perfeccionado por la experiencia acumulada de múltiples generaciones.
Luca Carlevarijs. Vista de Venecia, con el Palacio Ducal. 1690-1720. Galleria Nazionale di Palazzo Corsini.
La idea de la forma como construcción histórica – y, más concretamente, la forma urbana – se ha transformado de pronto para nosotros en un tópico tremendamente contingente ya que es el grano fino de las ciudades del valle central de Chile, su prosa y no solo sus monumentos, el que corre el mayor riesgo de perder ciertas cualidades espaciales que actualmente lo definen y que constituyen no solo su sello de identidad sino uno de sus mayores potenciales de desarrollo. Esta idea puede transformarse a la vez en el segundo paradigma buscado, complementario al de la unidad singular prefabricada ya planteado por el proceso de reconstrucción político.
Restaurar e incrementar las cualidades antes mencionadas no significa congelar artificialmente una configuración urbana determinada, hecho que respondería más a una visión estática de los procesos históricos, ni imponer una respuesta anacrónica a un desafío futuro, sino plantear la necesidad de reconocer los valores acumulados que deberían informar las lógicas internas de los nuevos proyectos, algunos de los cuales son los siguientes:
1.-Continuidad en las líneas de edificación para una clara definición del espacio público.
2.- Coherencia del conjunto dada por la sumatoria de unidades menores.
3.-Neutralidad y flexibilidad de los espacios, de forma que puedan incorporar usos diversos en el tiempo sin comprometer la noción del total.
4.- Ventanas sobre la calle como un elemento de control del espacio público.
5.- Eficiencia energética, dada originalmente por la alta inercia térmica de los sistemas de masa.
Como se podrá constatar, los cinco puntos enunciados no intentan hacer referencia ni a un lenguaje ni a una condición material específica – despejándose por tanto la amenaza reaccionaria que suele orbitar en torno a algunos de los temas expuestos anteriormente – aunque sí plantean lógicas de agrupación, flexibilidad, neutralidad, estructura y habitabilidad que deberían constituir puntos de partida para los futuros proyectos.
PREFABRICAR LA FORMA URBANA
La definición del nuevo paradigma tiene una consecuencia directa sobre el primero, cual es complementar el foco de atención singular por el del conjunto de la forma urbana. La incorporación de este criterio permitirá que la evaluación de las virtudes de un modelo por sobre otro no estén basadas exclusivamente en sus atributos puntuales, sino en la consecuencia que éstos producen en la unidad mayor de la ciudad. Asimismo, al aceptar la máxima de la prefabricación como una lógica idónea a los complejos y variados escenarios de reconstrucción, se despeja en parte la resistencia dada por una aproximación material al problema – adobe o no adobe – y se abre el abanico no solo a la innovación tecnológica sino a la posibilidad de nuevos tipos urbanos.
Tenemos que ser plenamente conscientes de que la reconstrucción material debe traer aparejado un repertorio formal específico y sopesado cuyas consecuencias serán directas no solo en la mantención, mejoramiento o pérdida de los valores ya mencionados, sino en los modos de vida de cada una de las familias afectadas. La claridad con que asumamos estos temas nos permitirá transformar la urgencia en una oportunidad.
[1] Según el diagnóstico entregado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo de Chile (MINVU), el terremoto afectó gravemente a una ciudad de más de 200.000 habitantes, cinco ciudades de más de 100.000 habitantes, cuarenta y cinco ciudades sobre los 5.000 habitantes y más de novecientos pueblos y comunidades rurales y costeras, dejando un saldo de 500 personas fallecidas o desaparecidas y un número de más de 800.000 damnificados.
[2] “No se recomienda bajo ninguna condición la construcción ni reconstrucción de edificaciones de vivienda cuya estructura dependa de la tierra cruda, cualquiera sea éste su sistema constructivo, adobe tradicional, albañilería de adobe, tapial, etc., en tanto la tierra cruda es un material cuyo comportamiento no se puede predecir dado que no se controla su fabricación ni sus materiales, no se pueden conocer los parámetros de cálculo, por lo tanto, no se puede verificar su estabilidad aplicando la Norma NCh 433 Of. 96 (Norma de diseño sísmico de edificios).” Informe Técnico, Comité Adobe, Santiago, Chile. Julio 2005.
[3] Diagnóstico Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU), “Programa de Reconstrucción Nacional en Vivienda: Chile Unido Reconstruye Mejor”, 29 de Marzo de 2010.
[4] “El subsidio es una ayuda directa que entrega el Estado a aquellas familias que no pueden financiar por si solas su primera vivienda, que se complementa con el ahorro familiar y en algunos casos con créditos hipotecarios y/o aportes de terceros. También existen subsidios para el mejoramiento de viviendas sociales, de entornos y barrios”. www.minvu.cl
[5] Expuestos en escala real en las denominadas “Ferias de Viviendas Industrializadas” de Maule y Concepción.
DESDE EL PATRIMONIO, LA PREFABRICACIÓN Y LAS ORGANIZACIONES
LA RESPUESTAS DISCIPLINARES FRENTE AL TERREMOTO
CHILE 8.8, la muestra chilena exhibida en la Bienal de Arquitectura de Venecia 2010 a partir de la convocatoria de la Dirección de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores (DIRAC), es doblemente innovadora y meritoria. Por un lado, es la primera muestra de las acciones que los arquitectos chilenos llevan a cabo en el ámbito del terremoto del 27 de febrero pasado, y por otro, permite exponer proyectos, obras y asociaciones que responden a esta convocatoria específica, y que de otra manera difícilmente estarían presentes.
De un tiempo a esta parte existe una difusión extensa y valorable de la arquitectura chilena en los medios de divulgación internacional de la disciplina. Estos tienden a mostrar una serie de proyectos construidos, reconocidos por su alta calidad arquitectónica. Se presenta una arquitectura cargada de una fuerte tradición moderna, profundamente atractiva en sus relaciones con los paisajes extremos que caracterizan a este país, y que se constituyen como una excepción al visitar nuestras ciudades. Desde el número 650 de la Revista Italiana Cassabella, dedicada a Chile en el año 1997, hasta el número 430 de la revista AU, igualmente dedicada a Chile en el 2008, han pasado 11 años de intensa producción disciplinar que ha dado mucho que reflexionar, y que ha alimentado cierta curiosidad por la práctica arquitectónica nacional.
Las apremiantes situaciones post-catástrofe requieren de esa creatividad, innovación y profesionalismo mostrados hasta ahora. Esto fundamenta una esperanza de la disciplina por lograr una democratización de la arquitectura, aparentemente culta y reservada sólo para las elites. Por ello resuena la palabra oportunidad. Oportunidad para que desde la planificación urbana hasta el proyecto de vivienda mínima sean tratados con la dignidad que merecen y con la capacidad propositiva de los arquitectos chilenos. Oportunidad para dar paso a visiones reflexivas de las tremendas necesidades de este azotado país, donde la arquitectura hoy se acerca más al servicio social que al diseño de piezas exclusivas.
Esta noción ya había sido retratada por Torrent: “…una cultura asentada en la parquedad, el desapego y el empezar de nuevo, caracteriza a este lugar del planeta sometido con frecuencia a catástrofes y a cierta condición ancestral de pobreza.”[1] Otra vez se debe comenzar de nuevo, y esta muestra intenta recoger esa disponibilidad a enfrentar la arquitectura desde la realidad, caracterizada por la urgencia y las necesidades primarias. Las banalidades no caben, pero no por ello cabe renunciar a una arquitectura de calidad espacial, formal y material, cargada por la esperanza de soluciones adecuadas a la escasez de recursos. Este potencial es lo que esta muestra quiere presentar a la comunidad internacional.
La catástrofe ha puesto una vez más a la disciplina en las condiciones menos cómodas y más trabajosas. El ingenio en el uso de materiales y métodos constructivos, el pragmatismo formal y la experimentación controlada de las condiciones del encargo, están puestas a prueba más que nunca.
LA MUESTRA
La exposición se divide en tres categorías riquísimas en sí mismas, que plantean problemas genéricos frente a la catástrofe, bajo las soluciones específicas.
El primer grupo, Patrimonio, recoge las obras que lidian con los materiales (adobe y teja de arcilla) y los sistemas constructivos (quincha, adobón, adobe, etc.) que aunque frágiles frente a los movimientos telúricos son generalmente utilizados en vastas zonas de la ruralidad chilena. El adobe, en sus distintas versiones y las tipologías que las acompañan, se encuentra sometido a requerimientos técnicos nuevos. Así, la necesidad de mantener y preservar tipologías en los pueblos del norte y del sur, propone búsquedas arquitectónicas que rescatan la expresividad de la masa edilicia, con tipologías clásicas de los poblados, tales como la calle corredor, el techo inclinado, la galería y el patio. Ejemplos de ello son la reconstrucción de la calle corredor del pueblo de Pumanque de Colectivo Muro y la del pueblo de Curepto de Lira, Rodríguez y Arroyo; la casa Coya de OWAR y eP/studio, y la Biblioteca de San Lorenzo de Proyecto Tarapacá. Las apuestas desafían la preservación de ciertos modos de vida asociados a estas arquitecturas, así como la forma de construir el débil grano urbano de los poblados del paisaje rural característico de Chile.
El segundo grupo, Prefabricación, enfoca el problema de la urgencia en los bajos costos constructivos versus rápidos montajes. De esta manera intenta dar soluciones creativas e innovadoras en el campo de la arquitectura prefabricada ahí donde hoy no queda nada: caletas, campos y pueblos que deben volver a vivir con dignidad sin olvidar por qué están ahí. En estos casos, la arquitectura escolar presentada por Irarrázaval en la Comuna de Retiro y por el equipo de Universidad Finis Terrae en Caleta Tubul, utilizan contenedores marítimos para dar soluciones rápidas a la destrucción total o parcial de sus establecimientos educacionales. Por otra parte, Klotz, Balze, Lyon y el equipo de la Universidad de Santiago se cuestionan, desde las estructuras modulares, la posibilidad de dar respuestas rápidas pero ajustadas a las condiciones espaciales tradicionales y a la recomposición de los sistemas productivos.
El tercer grupo, Organizaciones, es aquel que reúne a asociaciones existentes o nuevas, que reaccionaron ante la emergencia desde sus posibilidades de gestionar proyectos para atender las demandas de las comunidades afectadas. La primera acción tomada desde la ONG Reconstruye, la Pontificia Universidad Católica y el Consejo de Monumentos Nacionales, fue evaluar los daños constructivos en los poblados y zonas urbanas afectadas, así como en el patrimonio construido que las caracterizaba. La innovación en los procesos de gestión de los recursos y la ayuda puso la problemática de la participación ciudadana y la actividad de grupos de trabajo interdisciplinares como algo necesario para generar una reflexión y reacción ante la inminente necesidad. En este grupo también está el Proyecto Memoria que propone el manejo de escombros de carácter patrimonial como material de trabajo en el espacio público.
Acompañan estos proyectos las fotografías de Mathias Klotz. Ellas realizan un barrido de imágenes que retratan e ilustran el contexto de devastación del que hablamos. Son al mismo tiempo un discurso gráfico de la desolación, donde materiales retorcidos, escombros flotantes, trozos de casas, automóviles y pavimentos son, entre otros, los elementos que permanecieron después del paso del mar, en lo que fue el tsunami post- terremoto.
En sintonía con este trabajo se presenta el video “Zona de Catastro” de Klotz, Celis y Pérez. Se trata de un perturbador registro videográfico de la zona costera afectada y que pretende contextualizar, sin relatos melodramáticos, la situación del área devastada.
Finalmente, el texto de Emilio de la Cerda cuestiona la reconstrucción desde el punto de vista de las acciones ya emprendidas por el gobierno y la capacidad de la disciplina de no sólo dar soluciones puntuales al problema del déficit de vivienda post- terremoto, sino de construir trozos de ciudad reconociendo los valores de aquello que desapareció.
LO QUE QUEDA POR DELANTE
A tan sólo 6 meses del terremoto, la muestra aquí reunida pone énfasis en la necesidad de mirar desde una perspectiva amplia, interdisciplinar y compleja, las potenciales soluciones presentes en el debate. Al mismo tiempo otorga un espacio para que los arquitectos puedan aportar, con una reflexión sobre el valor del patrimonio destruido, nuevas posibilidades constructivas y la oportunidad de gestionar proyectos para la comunidad. Todo esto sin agotar los temas aún latentes, como son la visión de renovación urbana y la reconstrucción del borde costero, por poner algunos ejemplos.
Como se dijo al inicio, lo que existe aquí es un enorme desafío para la disciplina arquitectónica chilena, que desde su alta calidad deberá volver sobre sí misma, pero en las condiciones más difíciles. Los bajos costos, la estrechez de recursos, la dificultad de gestión, la urgencia en la ejecución de los proyectos, el rescate de formas tradicionales, el valor de las ruinas, etc., son condicionantes proyectuales que necesitarán mucho más que tan sólo talento e ingenio, sino de estrategias concebidas en diversos niveles relativos a la apremiante realidad.
El desafío no será fácil ni para los ya consagrados arquitectos ni para los nuevos, quienes deberán abrir posibilidades con ideas frescas y desprejuiciadas que comprometan el terreno ganado internacionalmente por la arquitectura chilena.
Este catálogo y la exposición que acompaña, se han concentrado en mostrar soluciones frente a la destrucción, pero queda pendiente la valorización de aquello que quedó en pie; es decir, toda la arquitectura que resistió con enorme dignidad el terremoto y que representa una larga trayectoria constructiva de este país. Esta trayectoria, aún por evaluar, se ha sustentado en una constante revisión de la normativa sísmica y la innovación constructiva y estructural, desarrollada en Chile principalmente durante el siglo XX.
MACARENA CORTES
ARQUITECTO
[1] Torrent, Horacio. “Calvicie Geológica. Arquitecturas desde el Sur”. Catálogo Chile en Trienal de Arquitectura de Lisboa, 2007.
LA OPORTUNIDAD DE LA EMERGENCIA
Chile se hace presente una vez más en la Bienal de Arquitectura de Venecia, pero en esta ocasión lo hace con la marca inevitable de la tragedia. 8.8 grados en la escala de Richter transformaron el 27 de febrero pasado la tierra firme en arena movediza y el mar en un agresivo frente sólido que se movía a 750 km/h, arrasando con ciudades completas. 500 personas desaparecidas/muertas, 100.000 viviendas destruidas y otras tantas para ser demolidas, 17 hospitales inutilizados, decenas de cárceles y colegios clausurados y el patrimonio histórico (construido principalmente en adobe) gravemente dañado. La tragedia generó inseguridad y saqueos masivos, pero también movilizó la solidaridad de millones de chilenos, estudiantes y profesionales que se trasladaron a la zona cero a levantar viviendas de emergencia y a crear soluciones para una reconstrucción con futuro. Entre ellos, los arquitectos chilenos.
La nueva edición de la Bienal de Arquitectura de Venecia propone que el público se encuentre en la arquitectura y que la arquitectura diseñe nuevas relaciones con la ciudadanía. Una arquitectura más reflexiva y alejada de la seducción de la espectacularidad, nos invita ahora a exponer lo que nuestra condición territorial nos ha obligado a enfrentar: los modos de hacer una arquitectura bajo la presión extrema de responder a la urgencia de la reconstrucción como un doble desafío, material y simbólico.
Las imágenes más pregnantes del terremoto del 27 de febrero en los medios de comunicación internacionales han estado centradas en las edificaciones destruidas y en los saqueos. Las ideas que teníamos sobre la permanencia material de “la cultura del adobe”, así como la desagregación de los lazos básicos de la solidaridad, nos han conducido a modificar drásticamente el significado del concepto mismo de reconstrucción. Los nuevos modos de vida del siglo XXI están determinados por la responsabilidad de pensar la reconstrucción más allá de la recuperación de las edificaciones afectadas, afirmando antes que nada la recuperación del trabajo. Esto significa, trabajo del duelo anímico tras la tragedia y trabajo de elaboración de un conocimiento nuevo que nos permita distinguir la fase de emergencia de la otra, más permanente y duradera, de reconstrucción de los espacios mínimos donde se recompone espacialmente la sociabilidad en la zona devastada.
Estar presentes en Venecia es una oportunidad para activar la necesaria reflexión sobre las posibilidades de la arquitectura como anticipación y proyección de nuevas formas de vivir. La condición propia de nuestro terreno, del movimiento sorpresivo y destructor del suelo donde nos paramos, nos ha forjado el carácter: sabemos ponernos de pie nuevamente y ser creativos para lograrlo. Tenemos historia en esto.
La tragedia no es la única carta de presentación que traemos a Venecia. Nos avala el “renacimiento chileno”, como llamó Keneth Frampton a la visibilidad que los arquitectos chilenos han logrado en la última década en publicaciones, encuentros y reconocimientos internacionales. Un interés que no sucedía quizá desde los tiempos en que Emile Duhart construyera la CEPAL, un edificio emblemático para la arquitectura latinoamericana. La generación que ha ocupado el campo arquitectónico desde la década del 90, ha vuelto a poner en escena la renovación de una práctica que sabe articular el habitar de los espacios extremos del territorio chileno (desierto y costa, Patagonia y bosque sureño) con una arquitectura experimental y creativa. Por eso no extraña que otras dos oficinas chilenas estén invitadas a la muestra internacional de esta Bienal: Smiljan Radic y Pezo von Ellrichshaussen.
La arquitectura surgida en nuestro territorio no solo propone modos de vida en geografías extremas, sino que responde con ingenio a una economía de medios. Notoriamente ha sabido ser propositiva ante la emergencia como práctica de vida permanente, para dar soluciones que no sólo tienen que ver con la arquitectura en la visión más purista del término, sino con la integración social de los grupos más desposeídos. Bien se conoce esta historia en Venecia: fue aquí donde se premió en 2008 con el León de Oro la solución para viviendas básicas del grupo Elemental, liderado por Alejandro Aravena (único arquitecto latinoamericano que es miembro del jurado del Premio Pritzker).
La consistente curatoría que Sebastián Gray ha realizado para el nuevo pabellón que Chile trae a Venecia muestra que la emergencia activa rápidamente la capacidad crítica y creativa de la arquitectura chilena para proponer no sólo como volver a poner de pie una sociedad derrumbada, sino también transformar la emergencia en oportunidad. Lo que vemos aquí no sólo habla de reconstruir, sino construir imaginando un Chile mejor. Las propuestas no sólo hacen referencia a la individualidad de las viviendas, sino que se enfocan más bien en la colectividad de ciudades costeras que en su proceso de reconstrucción no sólo deberán saber hacer frente a un tsunami sino también a reparar la escasez de espacio público que las ha caracterizado. Estar en Venecia nos ha impulsado a enfrentar con propuestas concretas el desafío de una reconstrucción renovadora que no sólo perdure en el tiempo -pese a las inclemencias geográficas-, sino que construya en base a modelos de habitabilidad más integrales para la población.
La arquitectura chilena contemporánea ha demostrado que hablar de arquitectura no se trata sólo de proyectar espacios, sino también de internacionalización de pensamiento, de integración social y de soluciones creativas ante la adversidad. Con ello han contribuido a construir calidad de vida, base de nuestro desarrollo cultural.
LUCIANO CRUZ-COKE CARVALLO
MINISTRO PRESIDENTE
CONSEJO NACIONAL DE LA CULTURA Y LAS ARTES
Junio 2010
PRESENTACION
El Ministerio de Relaciones Exteriores, a través de su Dirección de Asuntos Culturales, ha fomentado en los últimos años la participación de Chile en la Bienal de Arquitectura de Venecia. Nuestro país se ha situado con calidad y consistencia entre los Pabellones Nacionales, destacando las tendencias que nuestros arquitectos están desarrollando, lo que ha generado un creciente interés mundial por la evolución que experimenta esta disciplina en Chile.
En la pasada edición del año 2008, el arquitecto chileno Alejandro Aravena recibió un León de Plata por su proyecto “Elemental”, centrado en las viviendas sociales. El jurado de Venecia reconoció en él a una de las grandes promesas jóvenes de la arquitectura internacional.
Hoy, enfrentados a la duodécima versión de este encuentro, consideramos ineludible abordar la tragedia que azotó recientemente a gran parte del país. El terremoto y el maremoto del 27 de febrero pasado dejarán, sin duda, secuelas humanas y sociales imborrables para la familia chilena; a través de estos acontecimientos también pudimos experimentar una vez más la solidaridad internacional en múltiples campos, particularmente en la recuperación del patrimonio destruido. Al mismo tiempo, las consecuencias de este sismo sentarán un precedente sobre los parámetros de calidad con que nuestros arquitectos e ingenieros han estructurado las edificaciones de nuestras ciudades modernas, incorporando a la belleza y osadía de nuestras edificaciones elementos que disminuyeron considerablemente las víctimas y daños asociados.
Esa es precisamente la imagen que busca realzar el Pabellón Chileno en esta XII Bienal de Arquitectura de Venecia. Para ello, la Dirección de Asuntos Culturales de la Cancillería convocó a su Consejo Asesor de Arquitectura, compuesto por expertos en la materia, incluido el presidente en ejercicio del Colegio de Arquitectos de Chile, Sr. Patricio Gross. El equipo designó al Sr. Sebastián Gray como comisario de la exposición CHILE 8.8, considerando su amplia experiencia en bienales internacionales. Así, se reunieron distintas propuestas surgidas tras el terremoto, concentrándose no sólo en soluciones arquitectónicas de emergencia sino en el espíritu que caracteriza la construcción en un país sísmico.
Con la muestra CHILE 8.8, nuestro pabellón nacional tendrá un espacio destacado en el contexto de la bienal. La gestión y coordinación de este montaje responde a un esfuerzo conjunto de la Dirección de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, la Fundación Imagen de Chile y la Embajada de Chile en Italia. Todas estas instancias coinciden en destacar, en forma creativa y reflexiva, el buen momento por el que atraviesa la arquitectura en Chile y su gran capacidad de reacción a las problemáticas de una geografía bella en su diversidad, pero a la vez terrible y desafiante. Todo esto nos permitirá analizar, en una aproximación visual y conceptual, la constatación cada día más evidente de una naciente arquitectura chilena de características únicas y universales en su estética y soluciones.
El Pabellón Chileno cuenta con un catálogo de excepción, editado por la arquitecta Macarena Cortes, que permite una mirada más pausada, analítica y pluralista a esta disciplina en Chile, transformándose en un complemento indispensable de la muestra.
Cabe destacar, por otra parte, que la exposición general de la XII Bienal de Arquitectura de Venecia, People Meet in Architecture, organizada en esta edición por la destacada arquitecta japonesa Kazuyo Sejima, cuenta con la participación de dos proyectos chilenos invitados. Se trata de los montajes del arquitecto Smiljan Radic y la escultora Marcela Correa, y de Mauricio Pezo y Sofía von Ellricshausen; estos últimos curadores de la muestra I Was There que presentó el Pabellón Chileno en la pasada edición de la bienal.
La XII Bienal de Arquitectura de Venecia es una instancia relevante para difundir y estimular los grandes avances de los profesionales chilenos en esta área. Por medio de su Dirección de Asuntos Culturales, el Ministerio de Relaciones Exteriores consolida ya una trayectoria y una continuidad en la internacionalización de nuestras más diversas producciones artísticas. Tras el trágico sismo que sorprendió a nuestro territorio hace algunos meses, es un orgullo ofrecer al mundo nuestra reflexión estética, arquitectónica y ambiental representada en la exposición CHILE 8.8.
ALFREDO MORENO CHARME
Ministro de Relaciones Exteriores de Chile
Santiago, 2010
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BIOGRAFÍAS
MARIANNE BALZE
Arquitecto de la Universidad de Chile y directora de la Asociación de oficinas de Arquitectos (AoA). Su oficina desarrolla proyectos de planificación urbana, vivienda unifamiliar, en altura y social, proyectos industriales y comerciales tanto en Chile como en el extranjero. Sus obras han sido publicadas en distintos medios. Participó como profesora en la Pontificia Universidad Católica de Chile.
BÍOBÍO PROYECTA
Es una organización sin fines de lucro, nacida post-terremoto en Concepción/Chile, bajo el amparo de la Universidad de Concepción. Conformada por estudiantes y profesionales ligados a la construcción, busca apoyar a zonas afectadas con proyectos de reconstrucción. Un campo de acción corresponde al “Diseño del espacio Público” con énfasis en la conservación de la memoria. En este marco el coordinador Patricio Mora (Licenciado en arquitectura UDEC), los arquitectos Hilda Basoalto (UDEC/2010), Claudia Cerda (UDEC/2009), Leonel Pérez (UBB/1994) y Viviana Vilches (UDEC/2009) y el estudiante UBB Felipe Rivera, crean “Proyecta Memoria”. Proyecto que busca abrir el debate en torno a la conservación del patrimonio destruido, con la idea del reciclaje de escombros simbólicos para reutilizarlos en espacios públicos chileno.
CLAUDIO CELIS
Estudios de Post-producción en Elsinore, Dinamarca y de Realización cinematográfica en la Universidad de Chile. Magíster en Teoría e Historia del Arte de la misma universidad. Desde el 2008 trabaja en la Universidad Diego Portales en el proyecto “Archivo, Imagen-tiempo, Ciudad” dirigido por Carlos Pérez Villalobos. Al interior de este proyecto ha trabajado como camarógrafo y post-productor de los documentales “Pesquisa sobre J.E.B” estrenado en Enero del 2009, “Para Parra”, estrenado en Octubre 2009, y en el documental “Santiago a veces” próximo a estrenarse. Es autor además del libro “Cine clásico: auto-reflexión e ideología. De Don Quijote a Toy Story”, publicado por la Universidad de Chile. Por último, y desde el año 2009, realiza un curso electivo de post-producción en la Facultad de Arquitectura Arte y Diseño de la Universidad Diego Portales.
COLECTIVO MURO
Colectivo MURO es un grupo de arquitectos y estudiantes de arquitectura, que nace a partir del terremoto de 2010. Su interés se enfoca en proponer respuestas arquitectónicas y urbanas contemporáneas en contextos patrimoniales. Lo conforman los arquitectos Maximiano Atria (UC 1999, Magíster UC 2008), Umberto Bonomo (IUAV 2004, Ph.D. UC 2009) , Rodrigo Santa María (UFT 2002), Cristián Olivos (UC 1998, Magíster UPC/ETSAB 2004) y los estudiantes de arquitectura Felipe Alarcón (UC) y Nicolás Urzúa (UC).
EMILIO DE LA CERDA
Arquitecto y Magíster de la Universidad Católica de Chile.| En el año 2005 forma junto a Álvaro Benítez y Tomás Folch la oficina OWAR Arquitectos, desarrollando proyectos públicos y privados de manera independiente hasta la fecha. Además es profesor Instructor en la Escuela de Arquitectura de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
SEBASTIÁN IRARRÁZAVAL
Arquitecto de la Universidad Católica de Chile en 1991 con estudios de post-grado en Urbanismo en la AA Architectural Association de Londres. Enseña taller de diseño arquitectónico en la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica de Chile desde 1994. Su trabajo ha sido expuesto diversas muestras como la de la UIA en Barcelona, la del Colegio de Arquitectos de Cataluña, el GSD en Harvard y las Bienales de Arquitectura de Santiago, Iberoamericana , Rótterdam y Venecia. Entre sus proyectos destacan el Showroom Moro, las casas Ocho al Cubo, La Reserva y Pedro Lira, el Hotel Índigo Patagonia y el Centro Cultural Embajada de Chile en Argentina.
ONG RECONSTRUYE
Somos una organización formada por profesionales, académicos y estudiantes de diversas disciplinas, cuyo objetivo es promover una agenda de desarrollo urbano sostenible y la producción colectiva del entorno construido. A partir del terremoto ocurrido en Chile en febrero de 2010 articulamos una amplia red de ciudadanos con el propósito de colaborar con el proceso de reconstrucción desde 3 ejes:
1 Construir capacidades en la comunidad, fortalecer la organización social y apoyar su participación en la toma de decisiones. 2 Promover la distribución equitativa de las plusvalías generadas en la reconstrucción, protegiendo el derecho al suelo urbano y al acceso a oportunidades. 3 Monitorear la agenda de reconstrucción y promover la transparencia de la información a nivel de la ciudadanía y de tomadores de decisión.
OWAR ARQUITECTOS
Oficina formada en el 2005 en Santiago de Chile por Álvaro Benítez, Emilio De la Cerda y Tomás Folch, arquitectos de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Actualmente desarrolla proyectos públicos y privados de diversa índole, además de mantener una labor docente en la misma casa de estudios. Su trabajo ha obtenido diversos premios – “Bienal de Arquitectura de Santiago” en 2008, “Monumento a la Integración Chileno-Argentina” en 2009 – y ha sido incluido en la Revista a+“44 Young Architects” (Barcelona 2008).
MATHIAS KLOTZ
Arquitecto en la Pontificia Universidad Católica de Chile en 1990. Ha sido profesor de taller de la Universidad Católica, Universidad Central, Universidad Federico Santa María, Universidad Diego Portales, y el Instituto Universitario de Architetura de Venezia. Ha impartido seminarios para pre y posgrado en Argentina México, España y Uruguay. Ha sido Director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Diego Portales (2001 – 2003) y desde el 2003 ejerce como Decano de la facultad de Arquitectura, Arte y Diseño de la misma Universidad. Ha dictado conferencias en España, EEUU, Canadá, Italia, Alemania y Suecia, Venezuela, Ecuador, Francia, China, Canadá entre otros.
RAIMUNDO LIRA – DAVID RODRÍGUEZ – DIEGO ARROYO
Como miembros de la Asociación de Oficinas de Arquitectos de Chile, Aoa, las oficinas de los arquitectos Raimundo Lira y David Rodríguez, se unieron para proponer una solución a los pueblos afectados por el terremoto. Raimundo Lira, es arquitecto de la Pontificia Universidad Católica de Chile, 1976, ha participado en varios proyectos publicados de edificios habitacionales y de oficinas, destacando el edificio Manantiales, expuesto en la exposición “Tall Buildings” en el MoMA de N.Y., 2004. David Rodríguez, arquitecto de la Universidad de Chile, 1985, se ha especializado en sistemas industrializados. Ambos han sido Directores y Presidentes de la Aoa. Diego Arroyo, es arquitecto de la Pontificia Universidad Católica, 2003 y profesor instructor del área de tecnologías de la Escuela de Arquitectura de la PUC, trabaja desde 2006 en la oficina de Raimundo Lira.
ARTURO LYON
Arquitecto de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) y Master en el Design Research Laboratory de la Architectural Association (AA). Ha trabajado en Zaha Hadid Architects y dictado clases y workshops en la AA enfocados en diseño paramétrico y uso de algoritmos en arquitectura. Actualmente es profesor en PUC y co- fundador de LyonBosch Arquitectos.
MONUMENTOS NACIONALES
Es la institución estatal a cargo de la supervisión y tuición del patrimonio monumental, incluido el arqueológico. Su secretario ejecutivo es el abogado, Óscar Acuña Poblete, quien, inmediatamente después del terremoto de febrero, formó equipos de trabajo dedicados a la evaluación de los daños en bienes patrimoniales, creando una comisión especial que coordina la arquitecta Mirja Díaz Santibáñez. Ambos participaron en la edición del Catálogo Nuestro Patrimonio Hoy, junto a Elena Cruz Turell, licenciada en Diseño de Ambientes y Objetos, directora de proyectos de la Corporación Patrimonio Cultural de Chile, entidad de carácter privado y sin fines de lucro dedicada a tender puentes entre el mundo público para la preservación del patrimonio cultural
CARLOS PÉREZ VILLALOBOS
Doctor en Literatura y Licenciado en Filosofía. Dicta cursos en la Facultad de artes de la Universidad de Chile y es profesor titular de la Universidad Diego Portales, en la que dirige el programa de investigación “Archivo, imagen-tiempo, ciudad”; es miembro honorario de la Sociedad chilena de psicoanálisis (ICHPA). Autor de numerosos ensayos, ha publicado los libros: Dieta de archivo. Memoria, crítica y ficción (Ed. Arcis, 2005); Borges, agonismo y epigonía (Ed. Palinodia, 2007); y ha realizado los documentales: Pesquisa sobre J.E.B. (2008); Para Parra (2009); Santiago a veces (2010).
PROYECTO TARAPACÁ
Este proyecto nace como una iniciativa estudiantil en respuesta al sismo ocurrido el 13 de Junio de 2005 en el Norte de Chile, generando propuestas de reconstrucción en base al estudio de San Lorenzo de Tarapacá. El equipo está conformado por Samuel Bravo, Bernardita Devilat, Verónica Illanes, Felipe Kramm y Natalia Spörke, arquitectos PUC. En el año 2007 se trabaja en conjunto con parte de equipo ganador del Concurso Tarapacá, destinado a generar propuestas para la vivienda. Con ellos se diseña una Biblioteca para los habitantes del lugar, construida como prototipo de reconstrucción en conjunto con voluntarios y pobladores ese mismo año, testeando así el sistema constructivo. El resto del proyecto se completa el año 2009 mediante fondos estatales.
EVAN PRUITT
Master of Architecture, University of California Berkeley (2008). Bachelors of Science in Art and Design, Massachusetts Institute of Technology (2005). Evan founded eP/studio, an architecture and design studio based in San Francisco, California, in 2007. She initiated a collaboration with OWAR Arquitectos in 2008 for the design and construction of Casa Coya.
SQUELLA ARQUITECTOS
La oficina Squella Arquitectos, nace como equipo con el proyecto de la Iglesia Matriz después del terremoto del año 1985, cuando el año 1993 se inicia su reconstrucción. En ese momento se recibe la invitación a participar en una propuesta para la reconstrucción, lo reúne a sus integrantes por primera vez en torno a este proyecto de arquitectura, situación que continúa hasta el día de hoy desarrollando nuevos y distintos proyectos. La oficina cuenta con los siguientes arquitectos asociados: Jorge Squella Avendaño y Jorge Squella Correa, Arquitectos P. Universidad Católica, Sebastián Squella Correa, Arquitecto Universidad de Chile y Germán Squella Correa, Arquitecto P. Universidad P. Universidad Católica, Magister en Arquitectura P. Universidad Católica, Doctor Arquitecto ETSAB – U P C.
Escuela de Arquitectura, UNIVERSIDAD FINNIS TERRAE
Coordinador, Humberto Eliash (Arquitecto U. Chile 1975). Profesores: Carlos Bustamante (Arquitecto U. Finis Terrae), Alain Champion (Arquitecto U. Laussanne), Jorge Mora (Arquitecto U. Católica de Chile) Y Claudio Santander (Arquitecto U. Chile). Ayudantes: Sergio Araneda (Arquitecto U. Finis Terrae), Veronica Bravo (Arquitecto U. Finis Terrae), Catalina Henriquez (Arquitecto U. Finis Terrae) y Cristobal Vial (Arquitecto U. Finis Terrae). Equipo de estudiantes ganador del concurso: Cornelio Saavedra, Francisco Mebold, Rocio Taladriz, Francisca Lucero, Bernardita Lozano. Alumnos: J. Acevedo, H. Alarcón, D. Alvarellos, J.Bacovich, M. Bonta, D.Bravo, C. Budnik, M. Camus, C. Castro, I. Costabal, C. Echeverría, N. Edwards, N. Faundez, J. Fontecilla, C. Gajardo, C. Garrido, C. Grez, M. Henríquez, C. Hidalgo, C. Hormazabal, P. Hube, F. Infante, D. Izquierdo, N. Jordan, M. Larrain, P. Lavin, F. Maira, M. Moreno, M. Neira, V. Pacheco, A. Pastor, F. Perez-Cotapos, K. Pieper, I. Pizarro, F. Poblete, C. Prenafeta, C. Quevedo, D. Quiroz, M. Ricci, M. Robles, J. Salinas, S. Santa María, C. Sepúlveda, J. Skorin, J. Undurraga, C.Valdivieso, C. Valenzuela, M. Valenzuela.
Escuela de Arquitectura, universidad de santiago de chile
Rodrigo Aguilar – Ignacio Ruz – Rodrigo Valenzuela – René Velásquez
Rodrigo Aguilar (Viña del Mar, 1974) es Arquitecto por la Universidad de Chile (1998) y Master en Historia y Teoría de la Arquitectura por la ETSAB, Universidad Politécnica de Cataluña (2001). Actualmente se desempeña como Académico de la Universidad de Santiago de Chile. En 2008 ha sido galardonado con el Premio Promoción Joven que otorga el Colegio de Arquitectos de Chile. Ignacio Ruz (Talagante, 1987), Rodrigo Valenzuela (La Serena, 1986) y René Velásquez (Santiago de Chile, 1988) son Licenciados en Arquitectura y actualmente cursan Quinto Año de la Carrera de Arquitectura en la Universidad de Santiago de Chile.
Escuela de Arquitectura, PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE
Fundada en 1894, constituye la primera escuela de arquitectura formal del país y una de las primeras en América Latina. Desde sus inicios se ha caracterizado por su fuerte liderazgo en el ámbito de la enseñanza de la arquitectura y por entregar una especialización profesional de excelencia y de nivel internacional. Esta excelencia se refleja en la calidad de sus egresados -entre los cuales figuran 15 premios nacionales de un total de 24- y en la calidad de sus obras, las que reciben un permanente reconocimiento nacional e internacional. Actualmente esta formación profesional está complementada por el incremento de sus programas de Magíster y por el único Programa de Doctorado en arquitectura del país, los cuales aportan con una intensa agenda de actividades e investigación.
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